Al iniciar su conferencia iTALKS, Gómez se refirió a dos informes de la UNESCO muy reveladores. El primero publicado en 2010 y titulado “Ingeniería: temas, problemas y oportunidades para el desarrollo”, destacaba el impacto de la ingeniería y la necesidad de su puesta en valor. El documento, elaborado por más de 120 especialistas, mostraba la preocupante disminución del número de jóvenes interesados en la ingeniería, en particular mujeres, lo que pone en riesgo el desarrollo económico mundial.
El segundo informe, de 2021, que lleva el título de “Ingeniería para el desarrollo sostenible: Cumpliendo los objetivos de desarrollo sostenible”, recogía nuevamente la importancia crucial de la ingeniería, en este caso para conseguir todos y cada uno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
“Quince de ellos necesitan de la ingeniería, la ciencia y la tecnología para su consecución. El quinto es la igualdad de género y el empoderamiento de mujeres y niñas y el decimoséptimo es revitalizar la alianza mundial para el desarrollo sostenible. Parece evidente que la ingeniería, la ciencia y la tecnología resultan imprescindibles para cumplir estos 17 ODS”, remarcó Gómez.
Después de señalar que “la ingeniería siempre ha transformado el mundo para mejor” y que la quinta revolución industrial “será la más rápida y la más profunda” porque del equilibrio entre progreso y naturaleza depende el futuro del planeta, la representante de la Real Academia de Ingeniería se refirió a Inteligencia Artificial y Machine Learning, Blockchain, 5G, Edge Computing, Computación Cuántica y Nanotecnología.
“Parece evidente que estamos ante un cambio de paradigma sin parangón en la Historia, y lo hacemos dejando fuera de las estructuras que toman las decisiones a casi la mitad de las personas, a las mujeres”, estimó.
Tras citar a la escritora Mónica Nepote, quien dice que, gracias a la tecnología, estamos ante un “cambio de paradigma” que está transformando nuestra forma de estar en el mundo y que esta tecnología refleja los sesgos y estereotipos de quien la diseña, según ella, “hombres blancos y ricos”, Sara Gómez animó a las nuevas generaciones, sobre todo de mujeres, a interesarse por la ingeniería, haciendo de esa profesión “una bandera de inclusión, justicia y equidad”.
