La industria es el segundo sector más perjudicado. El más afectado ha sido el comercio, en el que un 83,3% de las empresas declaran haberse visto perjudicadas. Detrás de la industria, están los servicios (un 72,1%) y, en menor medida, la construcción (un 63,2%).
En términos generales, el 71,9% % de las empresas españolas se han visto afectadas por los efectos de la pandemia. Tan solo un 28,1% consideran que las repercusiones económicas de la crisis sanitaria han sido entre escasas y nulas para su actividad.
Atendiendo al tamaño, son las microempresas con menos de 10 trabajadores las más afectadas (un 75,3%), seguidas de las grandes empresas (un 70,9%). Entre las pequeñas y medianas empresas, las que tienen entre 10 y 249 empleados, el porcentaje de las que se reconocen perjudicadas se sitúa por debajo del 70%.
Por lo que se refiere a los Fondos Next Generation EU, el grado de conocimiento por parte de las empresas españolas mejora paulatinamente.
Si en el Estudio de Clima Empresarial presentado por la Cámara de Comercio de España el pasado mes de octubre, solo 4 de cada diez empresas decía conocer esos fondos, en este Observatorio de Competitividad ya son 6 de cada diez las que están al tanto de su existencia. Es decir, en dos meses el grado de conocimiento de los Fondos Next Generation EU se ha incrementado en 20 puntos porcentuales.
Por sectores, son las empresas industriales las que en mayor medida están familiarizadas con los fondos (68,7%), seguidas de las de servicios (61,6%). El menor grado de conocimiento se da entre las empresas del sector de la construcción (56,1%) y el comercio (50,5%).
Teniendo en cuenta el tamaño de las empresas, existe una relación directa entre la dimensión y su conocimiento de las ayudas. Este llega al 83,9% en el caso de las que tienen entre 50 y 249 empleados; el grado de familiaridad con los fondos desciende al 65,1% entre las empresas de 10 a 49 trabajadores, y se sitúa por debajo de la mitad (un 48%) entre las microempresas con menos de 10 de empleados.
El interés por acceder a las ayudas en mayoritario en el tejido empresarial, de modo que el 57,3% de las compañías estarían interesadas en las mismas, especialmente por parte de las compañías de mayor dimensión.
Respecto a la aplicación efectiva de las ayudas, las empresas advierten sobre el riesgo de que la excesiva burocracia asociada a los fondos Next Generation EU puede suponer para su solicitud y utilización (puntuación 4,2 en una escala de 1 a 5).