Eugenio Barroso García, CEO de MP Ascensores, ha subrayado la importancia de «quitar de la conciencia de todos los ciudadanos de Europa las ideas que nos han traído hasta aquí». Para el experto, Europa ha perdido su autonomía en sectores estratégicos como la energía, la defensa y la industria debido a decisiones pasadas que, si bien pudieron ser acertadas en su momento, ahora requieren una revisión. «Nos hemos despertado tarde», ha afirmado, destacando que la clave radica en mejorar la productividad.
«La mayor brecha es la inversión en intangibles entre Europa y otros países asiáticos. Nos cuesta invertir en lo que no se toca», ha advertido, señalando la necesidad de un cambio de mentalidad hacia una mayor apuesta por el capital humano, tecnológico y de gestión. Además, ha defendido que «es el momento de la industria», proponiendo que el Ministerio de Industria y Turismo pase a denominarse «Ministerio de la Inversión».
Por su parte, Ignacio García Fenoll, subdirector general de Políticas de Innovación en el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, ha asegurado que «la apuesta por la innovación supone una transformación de la economía y un cambio en la posición de Europa respecto a la geopolítica».
En este sentido, ha hecho referencia al informe Draghi y Letta, destacando que «no es que esté obsoleto, pero se publicó cuando algunos acontecimientos importantes no habían sucedido en el mundo». Asimismo, ha valorado positivamente el anuncio de Ursula von der Leyen sobre la inversión de 800.000 millones de euros en defensa y seguridad. «Contamos con los conocimientos, infraestructuras científicas y el talento, tenemos personas maravillosas. Podemos hacerlo», ha asegurado, aunque ha insistido en que «nos falta colaboración» y en la necesidad de «eliminación de trabas en el mercado común».
Valentín Tijeras García, vicepresidente global de I+D, producto y calidad en Cosentino, ha coincidido en que «nos hemos despertado tarde» y ha enfatizado el papel fundamental de las personas en la productividad. «Innovación es agilidad. No existe innovación si no hay agilidad», ha manifestado, criticando la lentitud de la burocracia europea y solicitando una regulación más clara.
Desde el sector de la construcción, Alejandro Sánchez Cañete, director de Estrategia, Innovación y Sostenibilidad en Sando, ha resaltado que «no se puede ser productivo si no se es innovador» y ha pedido a la Administración «más continuidad y flexibilidad en la regulación». Además, ha incidido en la importancia de «potenciar la colaboración público-privada» y en la necesidad de «formar a los servidores públicos» para mejorar la implementación de proyectos de innovación.
El debate ha puesto de manifiesto la urgencia de reforzar la soberanía tecnológica europea mediante una mayor inversión en innovación, colaboración y productividad. La mesa redonda ha dejado claro que, aunque Europa cuenta con el talento y las infraestructuras necesarias, es fundamental un cambio de mentalidad y estrategia para afrontar los retos globales del futuro.
