REPORTAJE

iTALKERS Farma: Hablan las especialistas de la industria del medicamento

La industria farmacéutica se ha convertido en uno de los principales dinamizadores de la economía española, por sus niveles de exportación, productividad y empleo de calidad, un sector productivo donde destaca el papel de la mujer, también en los puestos directivos.

En 2022, el sector registró su máximo histórico en ventas al exterior, lo que la ha convertido en la tercera fuerza exportadora de España, sólo por detrás del segmento del automóvil y del de los combustibles, gracias a las 103 plantas de producción de medicamentos de uso humano, once de ellas de medicamentos biológicos.

Según los datos recogidos por Farmaindustria, que agrupa a la mayoría de los laboratorios farmacéuticos innovadores establecidos en nuestro país, lo que supone la práctica totalidad de las ventas de medicamentos de prescripción bajo patente en España, para el periodo de 2022, la actividad del sector alcanzó una cifra récord al conseguir llegar al 0,7% del PIB nacional, lo que se traduce en 8.000 millones de euros. Veníamos del 0,5-0,6% y esa subida “es algo extraordinario”. Esas tres palabras entrecomilladas pertenecen a Angélica Medrán, Privacy Senior Manager & Southern Europe Cluster Lead en la multinacional Johnson & Johnson. Medrán forma parte de la familia iTALKER desde hace poco: abril de 2024.

Por otro lado, la industria farmacéutica supera el 20% de la inversión total industrial en España. Es el sector que más aporta y lo hace en un entorno regulatorio “extremadamente complejo”, reconoció Medrán. Entre las actividades realizadas, es preciso mencionar las relativas a investigación y desarrollo, donde se ha destinado 1.400 millones de euros en 2022, de los cuales la mitad se han invertido en investigación clínica, es decir, en el cuidado de la salud y la calidad de vida de los pacientes.

La industria farmacéutica fue en 2022 y por cuarto año consecutivo, el sector industrial que más solicitudes de patentes presentó en España (181).

La radiografía farmacéutica aporta datos muy relevantes, pero poco visibles. En términos de empleo, la industria del medicamento es un referente en empleo cualificado y de calidad, de empleo en términos igualitarios. De hecho, casi el 53% son mujeres, pero “queda camino por recorrer”, aseguraba Medrán, porque el porcentaje de presencia femenina en los órganos de dirección cae ocho puntos hasta el 45%. “Hay que seguir trabajando para empoderar a las mujeres”, significó. Y ese trabajo debe ser conjunto, de hombres y mujeres.

En su conferencia ante la audiencia de industry TALKS, Medrán también se detuvo en la importancia de eliminar los sesgos inconscientes de género y dijo que su empresa tiene un programa específico destinado a que sus empleados eviten esa clase de comportamientos. También dispone de un programa de diversidad, equidad e inclusión donde participan voluntariamente empleados en programas concretos.

“No sólo es importante participar, sino que haya equilibrio”, resaltó Christina Gabriel, directora de la Unidad de Negocio de Takeda Farmacéutica España y miembro del colectivo Mujeres en Farma, porque, aunque en los últimos 30 años se ha pasado de 50 a 80 mujeres activas laboralmente por cada 100 hombres, las mujeres dedican casi el doble de horas por semana a tareas domésticas. Eso es una barrera en la progresión de la carrera profesional. “Es el modelo que enseñamos a nuestros hijos”, remarcó.

Mujeres en Farma es una organización sin ánimo de lucro que busca empoderar el talento femenino y tiene el firme compromiso de dar visibilidad a la industria farmacéutica como un sector referente en equidad e inclusión.

“¿Se autolimitan las mujeres? Pecando de generalización, sí. El 65% de las mujeres CEOs no se lanza hasta ser invitada a hacerlo”, opinó Gabriel. Esto se debe, en opinión de ella, a varios factores autolimitantes:

  1. El perfeccionismo,
  2. El “trabajo invisible” y la falta de marca profesional,
  3. Falta de mentores y minimizar la importancia de la política interna y el networking,
  4. Sesgos inconscientes, es decir, mensajes de la sociedad que agrandan la brecha de género.

Para ser aliado del cambio Gabriel, se formuló las siguientes preguntas: ¿Animas a las niñas a conseguir su máxima aspiración profesional en cualquier ámbito que elijan, incluyendo ciencias, tecnología, ingeniería? ¿En familia, normalizas los roles de los madres y padres trabajadores y repartes las tareas equitativamente entre niños y niñas? ¿Normalizas las figuras de liderazgo femeninas en distintos entornos? ¿Captas y corriges mensajes de sesgos inconscientes tanto en el día a día, como en los entornos educativos y laborales?

Los sesgos (in)conscientes de género citados por Medrán y por Gabriel representan uno de los elementos de la barrera cultural que impide el fomento del talento femenino en los entornos industriales, también en los farmacéuticos. Otros dos obstáculos detectados son la dificultad para conseguir la conciliación familiar y la falta de reconocimiento en las tareas realizadas. Pero esas trabas se pueden convertir en oportunidades de cambio. Así lo consideró la iTALKER Vanessa Miguelez, Country Manager Director para el área de Europa del Sur y Latinoamérica de la firma Moderna.

“El talento femenino es un recurso valioso que promueve la innovación, el crecimiento y el progreso”, aseguró la directiva de Moderna. “No somos meros espectadores de nuestra vida”, puntualizó.

La curiosidad, para ella, es una poderosa herramienta para explorar los propios intereses y pasiones, empezando desde la infancia y cuestionando el statu quo. También recomendó promover la confianza y la autoestima, la educación en valores como el respeto, la solidaridad, la honestidad o la tolerancia. “La educación en valores debe ser una prioridad en cualquier sistema educativo”, manifestó.

En esa línea de consejos prácticos, Miguelez recomendó ser intrépida y audaz, valiente y proactiva, incansable y colaborativa.  “La conciliación personal y familiar es uno de los retos del siglo XXI”, avisó. Y en este contexto la colaboración juega un papel esencial, fomentando, por ejemplo, la flexibilidad horaria.

En su opinión, el desafío de fomentar el talento femenino pasa por

  1. Inspirar: motivar roles de liderazgo,
  2. Capacitar: aprender habilidades y herramientas técnicas, así como las soft skills, es decir, la flexibilidad, la responsabilidad, la cortesía…
  3. Transformar: cambiar la cultura y hacerla más inclusiva,
  4. Conectar: mediante redes de equipos de networking, mentores, colaboradores.

La industria farmacéutica está marcada por el liderazgo femenino y esa circunstancia podría servir como motor para cambios en otros entornos donde la situación es menos favorable. Esta lúcida reflexión es obra de Carmen Montoto, directora médica, de Regulatorio y Calidad de Takeda España.

“A las mujeres nos ha costado mucho llegar a puestos de responsabilidad. Implican el trabajo de muchos años. No podemos relajarnos. La maternidad es un momento cuando se produce un parón en la producción científica, pero eso ya está empezando a cambiar”, admitió la directiva en el trascurso del trigésimo segundo ciclo de conferencias iTALKS.

¿Qué sucede cuando pensamos en ejemplos brillantes e inspiradores como Marie Curie, Rosalind Franklin o Katalin Karikó?, se preguntó Montoto. Pues que “en esas mentes brillantes encontramos características comunes como talento, esfuerzo y constancia”.  Lo mismo ocurre en el caso masculino.

 Después de admitir que “la falta de realismo en cuanto a capacidades o el excesivo afán de perfeccionismo no ayudan a avanzar a las personas preparadas”, Montoto remarcó la necesidad de “escapar de la discriminación positiva basada en cuotas”.

Sector farmacéutico

Como colofón de su parlamento, la representante de Takeda España sustanció la idea de que el papel de la mujer en la ciencia y en la industria es esencial dentro del progreso y por ello recomendó que se inspire a las niñas en las escuelas, enfocándose en el futuro para introducir estas mejoras que influyan en la manufactura y la investigación.

Por su parte, la directora médica de la farmacéutica Jazz Pharmaceuticals, Rosana Cajal, explicó la evolución del sector sanitario donde trabaja desde los años 90 del siglo pasado.

Entonces la participación de las mujeres en el mercado laboral ya era del 40,7%. En las facultades de Medicina se licenciaban 4.000 estudiantes, la mitad de ellos mujeres. Ahora, en 2023 son casi 8.000 los estudiantes y el porcentaje se ha elevado hasta el 70%.

“Con esta tendencia -dijo Cajal- estamos llegando a la feminización del sector sanitario y eso va a tener consecuencias y tendremos que tenerlas en cuenta”.

El sector de la salud español lo sostienen una mayoría de mujeres, indicó Cajal. Y las mujeres representan más de la mitad del empleo del sector farmacéutico en España. “Los boomers cambiaron esta realidad de forma radical”, sostuvo.

Sin embargo, la otra cara de la moneda, argumentó, es que la mayoría de los puestos de responsabilidad son varones, dado que se mantienen las dificultades para conciliar la vida laboral con la profesional.

La feminización de la profesión farmacéutica provocará, próximamente un aluvión de jubilaciones que deben ser previstas tanto por las empresas como por las administraciones, pronosticó la nueva iTALKER. “No es una cuestión de género sino de excelencia. ¿Qué cambios producirá? ¿Se adaptarán el sistema o las mujeres?” Dos buenas preguntas.

Julia Hierro ocupa una posición muy destacada en la multinacional farmacéutica Bristol Myers Squibb. Por un lado, es la directora de su Departamento Regulatorio para España y Portugal, pero además es la jefa de su equipo de ensayos clínicos en Europa. Desde esta amplia experiencia, la iTALKER compartió, no hace mucho, vivencias personales y consejos profesionales.

Madre de tres hijas, con dos carreras y un Doctorado por el King ‘s College de Londres, Hierro confesó que tuvo suerte de tener un jefe que creyera en ella cuando estaba en plena promoción. “Es importante tener un mentor que te guíe en tus pasos”, señaló.

Para conciliar trabajo y familia, tuvo que estar seis meses moviéndose continuamente entre Bruselas y Madrid y teletrabajando algunos días en casa. “Entonces eso no era habitual”, recordó.

A nadie le regalan nada; la constancia es el desarrollo de la carrera profesional, subrayó Hierro, remarcando que es especialmente difícil encontrar directivos mujeres, aunque el sector farmacéutico ofrezca más oportunidades al sexo femenino.

Recomendó con insistencia vivir una temporada en el extranjero pues abre la mente a otros mundos, uno se expone a otras culturas y sociedades y puede suponer una experiencia enriquecedora, como fue su caso particular.

“Eso transmito a mis equipos en España y Portugal”, declaró.

Finalmente, Hierro lanzó dos tips a la audiencia de industry TALKS. El primero es salir de la zona de confort y recoger otras experiencias; la segunda recomendación radica en ser íntegra, coherente con los propios principios éticos. Así, ella misma tuvo “la osadía” de plantear un problema de malas prácticas en su empresa y su director general la apoyó.

“El éxito no se mide por la posición a la que uno llega”, resumió la ponente, quien aconsejó que uno dé lo mejor de sí mismo de acuerdo con sus capacidades y valores.

De éxito también se ocupó Ana Álvarez, vicepresidenta para España de la firma Bial, cuando grabó su intervención para el canal iTALKS en julio de este mismo año.

“No soy farmacéutica, no es necesario serlo”, arrancó diciendo Álvarez, quien lleva más de 30 años en esta área productiva. “Entré como comercial y ahora soy directora general. Me he enfrentado a muchos retos y he disfrutado mucho por los avances profesionales y personales”.

Esta directiva aplica las enseñanzas del ikigai, un concepto japonés “para tener una vida larga y feliz” que parte de cuatro premisas: hacer “lo que te gusta, lo que sabes hacer bien, lo que el mundo necesita y que te paguen por ello”.

Después de señalar la importancia de la formación continua y de la “actitud de aprender”, Álvarez se detuvo en la trascendencia del talento “en varias dimensiones” como aporte de valor, como inteligencia y como aptitud. Y destacó tres conceptos: “el talento no entiende de género, el talento no tiene edad y el talento entiende de diversidad sin límites”.

“El propósito va más allá de la persona y la compañía; la esencia es contribuir a la salud de las personas, contribuir a curar enfermedades, a mejorar la calidad de vida de las personas enfermas”, remarcó la nueva integrante de la familia iTALKER, “pues las limitaciones les hacen sentirse más enfermos”.

En resumen, el sector farmacéutico “está lleno de oportunidades y vocaciones, lo que hace que sea tan atrayente” y pone “el talento al servicio de la salud”.

Total
0
Shares
NOTICIA ANTERIOR

Andalucía se incorpora a ‘Hydrogen Europe’ para acelerar el desarrollo de este vector energético en la región

NOTICIA SIGUIENTE

Andalucía lidera en España el impulso del emprendimiento en ciberseguridad

NOTICIAS RELACIONADAS