Esta iniciativa, cuyo principal objetivo es desarrollar soluciones innovadoras, permitirá además el impulso del sector y del ecosistema de ciberseguridad, uno de los retos de INCIBE y que desarrolla a través del fortalecimiento de las pymes en ciberseguridad y el apoyo a la industria para favorecer su crecimiento.
Las características de la licitación se ofrecieron durante el transcurso de una jornada técnica con empresas del sector de la ciberseguridad de Castilla y León, organizada por el Instituto para la Competitividad Empresarial (ICE). A través de este concurso público se busca el desarrollo de una solución tecnológica que permita identificar dominios o sitios web donde se desarrollan actividades ilegales de forma anónima, que no hayan sido identificados previamente, y que no se puedan encontrar en fuentes públicas, tanto en la Internet profunda deep web, como en la web superficial. El objetivo es el desarrollo de herramientas que permitan descubrir nuevos servicios ilícitos ocultos y monitorizados y, con la información obtenida, eliminarlos.
Con carácter previo a esta licitación se había llevado a cabo una consulta de mercado entre las empresas y operadores tecnológicos del sector para explorar las posibles respuestas a las necesidades tecnológicas detectadas.
Esta fórmula de compra pública innovadora se presenta como un nuevo mecanismo en la forma de apoyar la innovación, ya que permite contratar servicios de I+D para dar respuesta a un reto público para el que no existen productos o servicios desarrollados en el mercado, impulsando así el desarrollo en I+D y compartiendo riesgos y beneficios con las empresas adjudicatarias.
El plazo para la presentación de ofertas estará abierto hasta el 14 de mayo de 2021. A partir de la adjudicación, el plazo de ejecución está establecido en trece meses. El procedimiento se divide en dos fases competitivas, de siete y seis meses respectivamente, con sus correspondientes actividades y evaluaciones de carácter eliminatorio, y permitirá desarrollar varias soluciones innovadoras simultáneamente, de forma que se maximicen las probabilidades de éxito.
INCIBE tiene la misión de proteger y defender a la ciudadanía, menores y empresas privadas de España ante cualquier incidente de ciberseguridad y esta protección requiere de una vigilancia continua de entornos del ciberespacio que puedan suponer una amenaza. Así, INCIBE expuso en la citada jornada técnica que algunas redes de la deep web, como la red TOR, permiten a los individuos y organizaciones intercambiar información sobre redes públicas sin compromiso de su privacidad y evitar la censura, pero son utilizadas también por criminales para desplegar servicios ilícitos que pueden suponer una amenaza.
Estos servicios delictivos van desde la venta de datos robados de personas o de empresas, los chat y foros web donde se intercambia contenido relacionado con abuso sexual infantil, los sitios web donde se venden tarjetas de crédito robadas, armas, moneda falsificada, documentos de identificación robados o falsificados, o los sitios web donde se hace apología del terrorismo o la xenofobia. Así, el objetivo de identificar servicios ocultos en estas redes que no hayan sido identificados y publicados, y que permitan a INCIBE monitorizarlos para la detección de potenciales amenazas contra ciudadanía y empresas en España es de gran importancia.