En este acto presidido por el jefe del Ejecutivo, que tuvo lugar en el Instituto de Salud Carlos III, se contó también con la presencia de las ministras de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto; de Sanidad, Carolina Darias; de Ciencia e Innovación, Diana Morant, y de Hacienda y Función Pública, Mª Jesús Montero. Además, asistieron representantes de la industria farmacéutica, de organizaciones de pacientes y del sector sanitario.
Al comienzo de su discurso, el jefe del Ejecutivo calificó de “extraordinaria” noticia la autorización emitida ayer por la mañana por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios para “el ensayo clínico en fase II de la vacuna de la empresa española Hipra contra el COVID”, que demuestra que España se puede situar en la vanguardia de la lucha contra la pandemia. Este ensayo se llevará a cabo “en 10 centros hospitalarios y con más de 1.000 voluntarios”, y contará con una ayuda de 15 millones de euros del Gobierno de España, “tal y como aprobamos hace dos semanas”.
En su intervención sobre la presentación del PERTE para la Salud de Vanguardia, el presidente destacó que “se trata de aprovechar la oportunidad histórica que nos brindan los Fondos Europeos para apostar por la ciencia, por el Sistema Nacional de Salud y por una recuperación económica que sea justa mediante la colaboración público-privada”. Por ello, este PERTE, recalcó, implica un compromiso presupuestario histórico: “Necesitamos un Estado emprendedor que invierta y colabore, que converse con el sector privado” para que la transformación del sistema de salud “no genere brechas de acceso y asegure su sostenibilidad financiera”.
Sánchez puso en valor el papel de la ciencia, que “nos demuestra, una vez más, ser la mayor fuente de progreso, de bienestar, de seguridad. Nos ofrece nuevas esperanzas para enfermedades que hace años creíamos incurables, como el cáncer o la mayor parte de las llamadas enfermedades raras”.
Sánchez explicó que, en el marco del “afán transformador” de los sectores productivos estratégicos que impulsa el Gobierno, para el desarrollo de este PERTE “no solo hemos contemplado inversiones, sino que también estamos abordando reformas que nos permitan acelerar la transformación del sector”, y en ese sentido subrayó que “vamos a reformar la Ley de la Ciencia, para mejorar y apoyar una nueva carrera científica y la transferencia del conocimiento”. Ya en el verano de 2020 Sánchez había anunciado el Plan de Choque para la Ciencia, “a través del cual comenzamos a desplegar las actuaciones científico- técnicas orientadas hacia la implementación de la Medicina de Precisión”.
Ahora, al amparo del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, “se continúa este despliegue científico y sanitario en todo el territorio”, para lo que ha jugado un papel clave el Instituto de Salud Carlos III, “puente entre ciencia y sanidad”, y cuya labor y dedicación en la lucha contra la pandemia ha vuelto a destacar el presidente.
Objetivos del PERTE
Este PERTE tiene como objetivo prioritario y fundamental “fomentar y fortalecer la protección de la salud colectiva e individual mediante un sistema de salud de altas prestaciones transformado digitalmente”, sintetizó el presidente.
Para ello, el PERTE se desarrolla a través de otros cuatro objetivos específicos que ha enumerado Pedro Sánchez:
- En primer lugar, posicionar España como país líder en la innovación y desarrollo de terapias avanzadas, orientadas a la curación de enfermedades como la diabetes, las enfermedades neurodegenerativas, o el ELA, entre otras. Se trata de garantizar y hacer sostenible desde el punto de vista financiero la prestación por el Sistema Nacional de Salud de los sistemas de salud de vanguardia para todos los ciudadanos, reforzando “la joya de la corona que es nuestro sistema de salud universal y apoyar las excelentes capacidades de investigación, innovación y desarrollo clínico que tenemos en nuestras universidades, centros de investigación y sistema hospitalario”.
- Impulsar la implementación equitativa de una Medicina Personalizada de Precisión, favoreciendo el refuerzo, el desarrollo y la creación de empresas competitivas basadas en la generación de conocimiento aplicable a este objetivo.
- En tercer lugar, desarrollar un Sistema Nacional de Salud digital, con una base de datos integrada que permita la recogida, el tratamiento, el análisis y la explotación de los datos procedentes de las distintas fuentes para mejorar la prevención, el diagnóstico, el tratamiento, la rehabilitación y la investigación. “Con esta integración de datos, se va a poder desplegar una historia de salud digital para que todos los ciudadanos tengan toda la información relevante sanitaria y accedan a las prestaciones del sistema nacional de salud en todo el territorio”, indicó.
- Y, en cuarto lugar, potenciar la atención sanitaria primaria a través de la transformación digital, con la aplicación de tecnología avanzada para todas las actividades que impliquen relación con la ciudadanía y la gestión de los recursos en cualquier punto del país y en todos los ámbitos asistenciales, en condiciones de ciberseguridad, “reforzando así la cohesión social y territorial”.
Los cuatro objetivos del PERTE enumerados se abordarán a través de cinco líneas transversales:
- Fortalecer y desarrollar las capacidades del Sistema Nacional de Salud. Es necesario mantener la posición de liderazgo de España en investigación clínica y retener las inversiones de las empresas farmacéuticas multinacionales, potenciando la figura del profesional sanitario investigador.
- Desarrollar y modernizar la capacidad industrial de España orientada hacia la innovación. “Es importante ampliar nuestra autonomía industrial”, ha señalado el jefe del Ejecutivo.
- Desplegar instrumentos y estructuras que aseguren la colaboración y la coordinación entre el tejido científico y el tejido empresarial en todos los ámbitos de la cadena de valor de los productos innovadores.
- Reforzar la cohesión territorial, para incorporar a todas las Comunidades Autónomas en un proceso de transformación que está dirigido a todo el sistema sanitario. La innovación sanitaria y las oportunidades de desarrollo técnico e industrial “deben extenderse a todos y cada uno de los territorios del Estado”.
- Y, por último, fortalecer la formación y estimular la alianza entre las empresas, los centros del Servicio Nacional de Salud y los centros de investigación.
“En suma”, resumió el presidente, “con este PERTE vamos a contribuir al desarrollo de la Salud Digital. Gracias al despliegue de la transformación digital y a la medicina de precisión vamos a poder reducir en un 30% las diferencias interterritoriales en años de vida saludables tras los 65 años, así como la brecha de género identificada. Además, vamos a transformar la cadena de valor del sector de salud y haremos el tejido industrial más dinámico y ágil. La colaboración público-privada y la sinergia entre empresas grandes y pequeñas y startups desarrollarán un ecosistema de conocimiento e innovación que nos hará menos dependientes tecnológicamente”.
El presidente calificó de “gran noticia” para España que el Consejo de Ministros vaya a aprobar “en muy pocas semanas” este PERTE para la Salud de Vanguardia, “pensado y diseñado para mejorar la calidad de vida de todos y de todas. Para seguir estando a la cabeza en salud, bienestar y esperanza”, concluyó.