A estas ayudas pueden optar grandes empresas, PYMES o autónomos. En caso contrario, los taxis, las furgonetas para el transporte de 8 viajeros y las empresas de titularidad pública quedan fuera al beneficiarse de otras subvenciones. Las ayudas de cerca de 22 millones de euros, provienen de los fondos Next Generation de la Unión Europea y se enmarcan en el Plan de recuperación, transformación y resiliencia.
La finalidad de estas ayudas es descarbonizar el transporte profesional, a partir de la renovación de las flotas de vehículos pesados y el impulso de la tecnología eléctrica o de hidrógeno.
Dichas ayudas van destinadas a la adquisición de nuevos vehículos de gas, híbridos eléctricos, eléctricos puros o de hidrógeno; desguace de vehículos antiguos; transformación de motores diésel o gasolina en motores de electricidad, hidrógeno o gas; e instalación de infraestructuras de recarga para vehículos pesados y para la adquisición de semirremolques para autopistas ferroviarias.