Moderado por el editor de Financial Times responsable de mercados emergentes, Jonathan Wheatley, intervenieron asimismo Julie Linn Teigland, socia responsable del área de Europa. Oriente Medio, India y Africa (EMEIA) de la consultora EY, antes conocida como Ernst & Young; Jesko Hentschel, Country Director, Maghreb and Malta en el Banco Mundial, y Jaafar Mrhardy, director general de Tanger Med, un puerto de gran calado de nueva construcción situado en la vertiente marroquí del estrecho de Gibraltar
El debate sirvió para dar respuesta a preguntas sobre cómo se está adaptando la industria a la nueva era del comercio internacional, cómo está dando respuesta a los problemas de logística y falta de materias primas, cuáles son las prioridades en la ubicación de plantas y filiales, cómo garantizar la rentabilidad, calidad y tiempos en las cadenas de suministros y cómo responder a las necesidades de un mundo que busca de forma urgente la sostenibilidad y una mayor equidad.
El presidente de AMEC explicó que la pandemia está afectando todavía el funcionamiento de muchas plantas en todo el mundo, y en algunas áreas incluso están cerradas. Asimismo, fruto de los problemas del transporte marítimo y la falta de contenedores, “el coste del transporte se ha doblado, mientras que el de muchos materiales han aumentado hasta cifras que no habíamos visto en una década”. Se trata de un problema muy serio que está impactando en los precios finales y cuya resolución no llegará por lo menos hasta mediados de 2022, indicó Relats.
El problema es que el aumento de la demanda tras la pandemia no se ve acompañada por las entregas. Por el contrario, la falta de microchips ha llevado al a industria de la automoción a una disminución de la producción del 20%, y a un retraso de 5 y 6 meses en las entregas, explicó Relats. Esops ajustes ha provocado ajustes temporales de plantilla. La construcción de nuevas plantas de microchips espera normalizar la situación a mediados de 2022.
Frente a los problemas de logística y abastecimiento, el presidente de AMEC confirmó que se están produciendo cambios en las cadenas de valor. En el caso de Relats, multinacional con plantas en Europa, Marruecos, China, Vietnam y México, se está llevando a cabo de forma paulatina una redirección de la producción.
“Cuando fuimos a China en 2004 el país era la fábrica del mundo. Hoy es el primer mercado del mundo. Nuestros productos que se producen en Vietnam a menudo viajan a Europa o Suramérica. Esto está cambiando: nuestra producción en Vietnam se quedará para servir al sur de Asia y Japón. Marruecos dejará de manufacturar para Asia y lo hará para Europa y la de China no servirá a Europa”, dijo Relats.
A nivel general, Relats consideró que toda la cadena de suminstro también estará más cerca de las fábricas, debido además a la nueva tendencia en auge de personalización de los productos. Así, se produce un gran cambio: la estrategia se centra en estar cerca de los puntos de ingeniería y de los clientes. “Las firmas de automoción en Alemania ya están haciendo inversiones en este sentido, al igual que Tesla en EEUU. Francia e Italia hacen lo mismo, las inversiones se realizan en el país y no en otro lugar”, afirmó.
Con todo ello, entra también en juego un aspecto tan importante como la sostenibilidad, tal y como subrayó Relats. Además de reducir la huella de carbono en el transporte, las plantas industriales también están invirtiendo para ser más sostenibles. “Necesitamos responder y hacerlo ya. Invertir en energías renovables. Nuestro grupo está trabajando muy duro en esta dirección”, afirmó.
Los problemas de suministro “no se van a resolver pronto”, señaló Julie Linn Teigland, EMEIA Area Managing Partner en EY, quien explicó que la industria está estocando para asegurarse los materiales, cosa que no aliviará en absoluto la situación, que puede mantenerse durante los próximos 18 meses. Sin embargo, incidió en que las mejoras tecnológicas y la digitalización contribuirán de forma muy destacada a redirigir y gestionar de forma óptima las cadenas de valor. “Se está produciendo una increíble aceleración de la digitalización que veremos en los próximos 24 meses”, subrayó la ponente.
Jaafar Mrhardy, director general de Tanger Med, destacó la importancia de contar con una localización cerca del mercado y el cliente final para la industria. “Las multinacionales están eligiendo de nuevo Marruecos y Tanger para su producción para Europa”, agregó. La presión del ecommerce y la rapidez de entrega ha hecho que empresas como Zara o Máximo Dutti elijan relocalizarse, en un movimiento inverso al realizado hace 20 años. “África se beneficia de esta nueva tendencia”, afirmó. Para Linn, sin embargo, las nuevas tecnologías permitirán a la industria establecer un equilibrio para hacer un buen balance entre resiliencia y localización. Así, los procesos se automatizarán y el reto es cómo construir cadenas de suministro resilientes.
En cuanto a la preocupación por la sostenibilidad, Linn se detuvo en lo rápido que se están produciendo los cambios, como por ejemplo con la eliminación en la industria del transporte de todos aquellos materiales plásticos que no aportan valor.
Jesko Hentschel, Country Director, Maghreb and Malta en el Banco Mundial, también valoró la rápida transición ecológica que está llevando a cabo la industria. Aún así, subrayó la necesidad de colaborar en políticas globales y del comercio internacional para luchar contra las crecientes desigualdades y contra la pobreza. “Afrontar estos efectos globales de desigualdad y pobreza será crucial para el comercio en el futuro”, ha indicado, al tiempo que destacó “la certificación de la cadena de valor”. Para ir en la buena dirección, contribuyó “la pandemia, que ha favorecido un gobierno más fuerte”.