¿Cuáles son los principales retos que enfrentan las empresas españolas para adaptar soluciones de Industria 4.0?
Las empresas españolas enfrentan varios retos a la hora de adaptar soluciones de Industria 4.0, especialmente en lo que respecta a la digitalización. Aunque ya se han implementado tecnologías habilitadoras, los desafíos actuales están relacionados principalmente con los costos asociados a la digitalización. A pesar de las subvenciones disponibles, como los fondos Next Generation, estas no están alcanzando de manera efectiva al sector industrial, lo que dificulta la inversión en nuevos equipos, software y la modernización de la infraestructura, especialmente en áreas clave como la nube y la arquitectura empresarial.
Otro reto importante es la integración de sistemas. A medida que las industrias digitalizan sus procesos, deben integrar nuevas tecnologías, especialmente en la nube, y conectar dispositivos como sensores en las fábricas con los sistemas de datos. Esta integración requiere de perfiles especializados, como ingenieros de telecomunicaciones con conocimientos en sensórica, y expertos en la arquitectura cloud para gestionar grandes volúmenes de datos. La falta de estos perfiles y del conocimiento necesario para llevar a cabo estas integraciones es una barrera significativa.
La formación continua también es un desafío, ya que el sistema educativo no está suficientemente orientado a las necesidades del sector, lo que dificulta que los profesionales se actualicen con los conocimientos requeridos por las nuevas tecnologías.
En términos organizativos, la resistencia al cambio y la transformación cultural dentro de las empresas es otro obstáculo. La digitalización cambia profundamente los roles de las personas en las organizaciones, y esa resistencia puede ralentizar el proceso de transformación.
Por último, la regulación, especialmente en el ámbito de la sostenibilidad, está generando una gran incertidumbre. El pasaporte digital de producto es un ejemplo de normativa que está comenzando a implementarse, pero todavía existe un gran desconocimiento sobre su aplicación. Esta regulación está relacionada con la necesidad de integrar todos los sistemas y datos en la nube para poder conectarse con toda la cadena de valor, lo que supone un reto adicional para las empresas. A medida que surgen nuevas normativas, como las relacionadas con la inteligencia artificial, la industria se enfrenta a desafíos regulatorios que complican aún más el panorama.
El reto principal, sin embargo, sigue siendo la competitividad. Las empresas deben definir sus estrategias digitales para los próximos cinco años, integrando todas estas cuestiones en sus planes a largo plazo y encontrando las inversiones necesarias para hacer frente a estos desafíos.
En ese sentido, ¿qué sectores han mostrado mayor interés por estas tecnologías?
Los sectores que actualmente están mostrando mayor interés por las tecnologías de Industria 4.0 son bastante variados. Aquellos más afectados por la normativa regulatoria son los que más demandan estas soluciones. En primer lugar, el sector industrial, que busca la digitalización como una fuente clave de competitividad para integrar toda la cadena de valor y aplicar nuevas tecnologías. Dentro del sector industrial, diversas industrias, desde la alimentaria hasta la de máquinas y herramientas, están adoptando estas soluciones.
El sector energético, que lleva años trabajando en la transformación digital, es otro de los más avanzados. La digitalización en este sector está orientada a mejorar el uso de los combustibles fósiles y la electrificación, lo que aumenta su demanda de nuevas tecnologías.
El sector agroalimentario también ha mostrado interés en la digitalización, especialmente con la agricultura de precisión, un área en la que Ametic ha trabajado durante los últimos siete años. Si bien los avances en digitalización en este sector han sido importantes, el sector alimentario en particular todavía enfrenta retos para implementar estas tecnologías de manera generalizada.
Finalmente, el sector de la movilidad, en particular el de automoción, también está demandando estas tecnologías. Ametic, por ejemplo, tiene un grupo de trabajo centrado en la movilidad, dado el creciente interés y necesidad de transformación digital en este ámbito.
¿Qué habilidades y perfiles profesionales son más demandados en la industria 4.0 y cómo está preparada la educación en España para formar a los profesionales de este sector?
En la actualidad, las competencias demandadas en la Industria 4.0 son mucho más variadas que antes. Además de las habilidades tradicionales, se requieren nuevos perfiles y conocimientos avanzados. En primer lugar, hay una fuerte demanda de profesionales en programación y desarrollo de software industrial, así como en la integración de sistemas, especialmente en soluciones basadas en la nube, un área en la que todavía existe un importante desconocimiento. La integración de servicios mediante tecnologías como cloud y edge computing también es un área crítica, aunque aún no se ha cubierto suficientemente.
La analítica de datos y el Big Data siguen siendo habilidades demandadas, aunque este campo ya está más desarrollado. De manera creciente, se está solicitando talento en inteligencia artificial, especialmente en áreas como la inteligencia artificial generativa, que incluye el uso de agentes para gestionar tanto el conocimiento interno de la empresa como la relación con los clientes. Este tipo de tecnologías, que va más allá del uso básico de herramientas como ChatGPT, está comenzando a ser más relevante.
Otro aspecto clave es la ciberseguridad, que sigue siendo un área con carencias. Además, la creatividad e innovación son fundamentales en la digitalización, pero no todas las empresas, especialmente en el ámbito de las pymes, cuentan con una cultura de innovación y datos suficientemente sólida. Es en estas empresas donde los perfiles orientados a la innovación y la transformación digital están más demandados.
Entre los perfiles más solicitados se encuentran expertos en proyectos tecnológicos, ingenieros de software, científicos de datos, expertos en robótica, técnicos en automatización e inteligencia artificial, así como otros perfiles más especializados.
¿Qué iniciativas está impulsando Ametic para mejorar la formación y la capacitación en digital en las empresas del sector industrial?
Ametic está impulsando varias iniciativas para mejorar la formación y capacitación digital en el sector industrial. En primer lugar, contamos con una comisión de talento en la que colaboramos estrechamente con el Ministerio de Educación para desarrollar un pacto de Estado. Este pacto tiene como objetivo coordinar los esfuerzos entre la educación, la formación profesional y los distintos actores del sector para abordar las necesidades de capacitación de aquí a los próximos cinco años.
Además, Ametic organiza webinars y ha desarrollado una amplia documentación sobre tecnologías habilitadoras. En concreto, tenemos más de 20 documentos en formato ebook destinados a transferir conocimientos a las empresas, los cuales también están disponibles en la página de Industria Conectada 4.0 del Ministerio de Industria.
Otra de nuestras iniciativas son los Digital Innovation Hubs, un grupo de trabajo europeo que se implementa en España. Existen más de 25 de estos hubs, tanto financiados por la Unión Europea como privados, y desde Ametic coordinamos acciones con centros tecnológicos para ayudar a las empresas a familiarizarse con las nuevas tecnologías, promoviendo el conocimiento y el desarrollo digital en diversos sectores industriales.
¿Cómo cree que puede la integración de tecnologías como la inteligencia artificial, el Internet de las Cosas y la automatización mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de las empresas industriales?
La integración de tecnologías como la inteligencia artificial, el Internet de las Cosas (IoT) y la automatización puede mejorar tanto la eficiencia como la sostenibilidad de las empresas industriales de manera significativa. En cuanto a la sostenibilidad, se puede abordar desde dos perspectivas. La primera es la sostenibilidad del negocio en sí. Las nuevas tecnologías permiten crear modelos de negocio más resilientes, fundamentales para garantizar la continuidad y competitividad a largo plazo. Esto implica una cadena de suministro más resistente y digitalizada, que facilite la integración de proveedores y la gestión eficiente de los recursos.
Por otro lado, la sostenibilidad medioambiental también juega un papel crucial. Hoy en día, la demanda de productos sostenibles, tanto en términos de producción como de materiales reciclables, está en constante aumento. Las tecnologías digitales permiten mejorar la eficiencia de los procesos productivos y garantizar una fabricación más limpia y responsable, alineada con la economía circular. Además, la automatización permite optimizar la producción, reducir el desperdicio y mejorar la eficiencia operativa, lo que contribuye directamente a la sostenibilidad medioambiental.
La implementación de inteligencia artificial y automatización también facilita la creación de modelos de negocio más ágiles, con una estructura menos compleja y una mayor capacidad de adaptación. Esto, junto con la hiperpersonalización en los puntos de contacto con el cliente, permite ofrecer productos y servicios más ajustados a las necesidades del mercado, aumentando la competitividad.
En este sentido, las tecnologías de Industria 4.0 permiten no solo mejorar la eficiencia y reducir costes, sino también ayudar a las empresas a adaptarse a las exigencias del mercado en términos de sostenibilidad y regulación. Además, esta transformación facilita la integración en los ecosistemas digitales del futuro, como los espacios de datos, donde las empresas podrán compartir información y colaborar para crecer y competir de manera más eficaz.