Almató trabaja en Covestro, una multinacional líder en el desarrollo y la producción de polímeros de altas prestaciones que cubre las necesidades de distintos sectores industriales: automotriz, mobiliario, electrónico, construcción.
“La sostenibilidad es un imperativo para alcanzar un futuro más próspero y equilibrado”, lo que significa el balance “entre el crecimiento económico y las buenas prácticas en cuanto a la gestión de recursos y la generación de residuos” y minimizar los impactos medioambientales y sociales de las operaciones de la industria química.
Teniendo en cuenta que el gran objetivo es la neutralidad climática en 2050, “entramos en el paradigma que supone el cambio a la economía circular”, dijo Almató, “necesitamos encontrar nuevas vías que permitan cubrir nuestras necesidades de energía y materiales sin tener que partir de los combustibles fósiles”. “Para la industria química esto supone un cambio importante porque, por un lado, implica un cambio en sus propios procesos y, por otro, debe ofrecer soluciones a otros sectores”.
Dado que en la economía circular el uso de materias primas alternativas es esencial, se emplean recursos como la biomasa o residuos de plásticos; Covestro desarrolla productos alternativos en el área de pinturas y barnices, y proyectos precursores de nuevos polímeros para seguir avanzando.
Otro aspecto destacado por Almató en su ponencia como iTALKER fue el reciclaje innovador que permitirá incorporar distintos tipos de materiales y productos. Existe el reciclaje mecánico, el más establecido en la industria; y el reciclaje químico, más complejo, que descomponen moléculas. Un ejemplo de ello es el uso de espumas de poliuretano en la fabricación de colchones. Por último, se detuvo en la importancia que tiene el diseño para que los productos sean reciclados fácilmente.
