Para llevar a cabo este proyecto se ha conformado un consorcio amplio y multidisciplinar. Por un lado, se ha estructurado un equipo empresarial encabezado por Linares Biodiesel Technology (Libitec), que cuenta con la colaboración de destacadas compañías españolas como Iberfluid, Meltio y Liderkit, todas ellas con una sólida trayectoria y capacidades tecnológicas clave para el desarrollo del proyecto. Por otro lado, el ámbito académico y científico está liderado por la Universidad de Granada, con la participación activa de la Universidad de Sevilla, la Universidad de Jaén, la Universidad de Zaragoza y la Fundación FIDEAS. Además, la consultora Indesal ha jugado un papel fundamental desde las fases iniciales, dinamizando la creación del consorcio y trabajando intensamente para asegurar la cohesión de todos los actores implicados, así como el correcto funcionamiento de la coordinación entre los distintos grupos.
El proyecto BioCAs-CCU tiene como eje principal el desarrollo de una biorefinería innovadora, basada en principios de economía circular, cuyo fin es transformar residuos orgánicos en productos de valor añadido, especialmente biocombustibles sostenibles para el sector de la aviación. Este proceso incluye tecnologías avanzadas como la gasificación, la síntesis termocatalítica de hidrocarburos y el uso de reactores compactos fabricados mediante impresión 3D, una tecnología que conecta directamente con los avances de la denominada Industria 4.0. La impresión 3D, aplicada en este caso por la empresa Meltio, con sede en Linares (Jaén), permitirá fabricar componentes de geometría compleja esenciales para la eficiencia del proceso.
Uno de los grandes valores añadidos de BioCAs-CCU es la apuesta decidida por la micro reacción, una tecnología que, aplicada por primera vez en España en el ámbito de los biocombustibles sostenibles, posibilitará la producción de combustibles de aviación con una huella de carbono significativamente reducida, así como el aprovechamiento del hidrógeno verde como vector energético clave. Libitec, con su experiencia en tratamientos de materias primas y biocombustibles, desempeñará un papel central tanto en el desarrollo técnico como en la validación de los resultados obtenidos, que se llevará a cabo en sus propias instalaciones.
El proyecto representa, además, un claro ejemplo de cooperación público-privada bien equilibrada, en la que empresas de alta capacidad productiva colaboran estrechamente con universidades y centros tecnológicos. Esta simbiosis resulta esencial para abordar con éxito los retos técnicos y medioambientales actuales. Así, se asegura una transferencia real de conocimiento desde el ámbito académico hacia el tejido empresarial, al tiempo que se fortalece la competitividad del sector industrial español.
Desde el punto de vista financiero, el proyecto ha obtenido una dotación superior a los 5,6 millones de euros, procedente del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (MICIU/AEI) y del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). La agrupación de universidades y centros tecnológicos ha recibido una subvención específica de más de 2 millones de euros, lo que refuerza la dimensión científica del proyecto y garantiza una base sólida para el desarrollo de soluciones tecnológicas innovadoras.
La reunión de arranque del consorcio tuvo lugar el pasado 16 de enero de 2025 en el Campus Científico-Tecnológico de Linares, donde se establecieron las líneas estratégicas para los próximos meses. Durante este encuentro, Blanca Aguilar, portavoz de Indesal, y Óscar Laguna, representante de la Universidad de Granada, subrayaron la importancia de avanzar hacia tecnologías que integren nuevos sistemas catalíticos y micro reactores producidos mediante impresión 3D, como herramientas clave para obtener biocombustibles avanzados de forma más eficiente y sostenible. Esta visión, compartida por todos los socios, pretende facilitar la implementación real de estas tecnologías en el entorno industrial español.
Desde una perspectiva más amplia, BioCAs-CCU aspira a convertirse en un referente dentro del modelo de transición energética en Europa. Los biocombustibles avanzados que se desarrollan en el marco de este proyecto se obtienen a partir de residuos orgánicos que, tras ser tratados mediante diversas tecnologías, se transforman en compuestos de hidrocarburos similares a los de los combustibles fósiles, pero con un impacto medioambiental mucho menor. Esto permite no solo reducir las emisiones de dióxido de carbono en el proceso de producción, sino también durante su uso final, favoreciendo así el cumplimiento de los objetivos climáticos de la Unión Europea.
En definitiva, BioCAs-CCU encarna una apuesta por un modelo energético más sostenible y tecnológicamente avanzado, integrando conocimientos punteros en química, ingeniería de materiales, impresión 3D y sostenibilidad ambiental. En este sentido, el papel de la Universidad de Granada resulta crucial, no solo como coordinadora de la agrupación científica, sino también por su implicación directa a través del grupo de investigación FQM-247 “Fotoquímica y Fotobiología”, cuyo responsable, Óscar Hernando Laguna, lidera el diseño experimental de los micro reactores y de los sistemas catalíticos estructurados. La gestión administrativa del proyecto estará a cargo de la Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación (OTRI) de esta universidad, lo que garantiza el rigor en los procesos de seguimiento y ejecución.
En resumen, el proyecto BioCAs-CCU, con referencia PLEC2024-011196, se consolida como una de las iniciativas estratégicas más relevantes en el campo de los combustibles sostenibles en España, combinando innovación, sostenibilidad y cooperación entre instituciones públicas y privadas para avanzar hacia una economía más verde, digital e inclusiva.