El alcalde, José Luis Martínez-Almeida, destacó que la iniciativa nace del diálogo social y con la vocación de “mantener el liderazgo económico de la ciudad” y proyectarla como un lugar atractivo para vivir y trabajar. El acto de presentación, celebrado en el Palacio de Cibeles, contó con la vicealcaldesa Inma Sanz, la delegada de Economía Engracia Hidalgo, el concejal de Innovación Ángel Niño y representantes del Gobierno municipal, sindicatos, empresarios, universidades y expertos.
El plan se estructura en seis líneas estratégicas y 44 medidas que se desplegarán en tres fases temporales. A corto plazo se busca reforzar el conocimiento económico de la ciudad, crear polos industriales estratégicos, mejorar infraestructuras y facilitar financiación a pymes. En el medio plazo, la prioridad es modernizar espacios productivos y transformar el modelo de pyme industrial. A largo plazo, el foco estará en la sostenibilidad, la economía circular y la competitividad más allá de 2027.
Entre las medidas más relevantes destacan la creación de un Observatorio de la Industria y una oficina técnica de atención a empresas, con 800.000 euros de dotación; la promoción de sectores estratégicos como los semiconductores, la automoción, el aeroespacial o el hidrógeno verde (58,2 millones); el impulso a la movilidad sostenible y la certificación ambiental de áreas de actividad (28,7 millones); y el apoyo a clústeres de innovación en ciberseguridad, fintech, logística, salud digital, construcción o audiovisual (27,3 millones). Además, se destinarán 15,7 millones de euros al refuerzo del tejido de pymes y 65,6 millones al desarrollo de factorías industriales, economía circular e inversión extranjera.
Madrid parte de una posición sólida: la industria representa el 6,8 % de la economía local, aporta el 56 % del peso industrial de la región y emplea a más de 84.000 personas. En 2024, generó 12.730 millones de euros de valor añadido, con un crecimiento del 1,3 % respecto al año anterior. La capital también destaca por su capital humano cualificado, la presencia de empresas tractoras, su conectividad logística y digital, y un ecosistema innovador que favorece la transferencia de conocimiento.
Con este plan, el Consistorio busca consolidar a Madrid como un polo industrial moderno, sostenible y competitivo, capaz de diversificar su economía y atraer nuevas inversiones en los próximos años.