TRIBUNA

La fiebre del voluntariado corporativo se instala en España

Redacción

ENVERA

En España se ha desatado la fiebre del voluntariado social corporativo. Miles de empresas recurren a ONG para diseñar planes que satisfagan una necesidad que se ha convertido en un clamor por parte de los trabajadores de las compañías que operan en nuestro país. Una revolución a la que también se han ido sumando organizaciones intermediarias que ofrecen sus servicios a precio de oro y cuya función es captar a entidades sociales que sirvan a los intereses que demandan las empresas a través de sus departamentos de sostenibilidad o recursos humanos.

Así, empresas, trabajadores y ONG viven una revolución sin paragón en nuestra reciente historia de la responsabilidad social corporativa, que arranca a finales de los años noventa; un entusiasmo especialmente inclinado a la mejora de los aspectos sociales de los más vulnerables, y que se ha demostrado contagiosa, sumándose a estas acciones no solo la gran empresa, sino la PYME, que constituye el 99,8% del tejido empresarial español.

Unos y otros buscan voluntariado corporativo de alto impacto. Los empleados quieren dedicar parte de su tiempo a conocer otras realidades y, con su esfuerzo, contribuir a mejorar las comunidades en las que viven o por las que se sienten atraídos más allá de nuestras fronteras. Las estrategias empresariales necesitan afianzar con datos contantes y sonantes sus memorias de sostenibilidad, más necesarios que nunca para lograr, además de sus compromisos éticos, mejor financiación y mayor inversión en los mercados donde financiadores e inversores miran con lupa su huella en los criterios ESG de la Agenda 2030 de la ONU. 

Estrictamente hablando, el voluntariado corporativo es una actividad para desarrollar dentro del horario laboral. Con ello se refuerza el sentimiento de pertenencia y motivación del equipo en un 70 por ciento de las empresas, según recoge el informe “El estado del Voluntariado Corporativo en España”, del Observatorio de Vulnerabilidad y Empleo de la Fundación Adecco; se generan equipos más abiertos a la inclusión a través de la eliminación de sesgos inconscientes (43,9 por ciento), se permite a los equipos de trabajo desarrollar nuevas habilidades, actitudes y valores que mejoran su rendimiento (39 por ciento); se mejora el clima laboral (34 por ciento) y sirve también como motor de atracción del talento, porque los profesionales buscan trabajar en organizaciones cuyos valores se alinean con los propios.

Sin embargo, aunque estas acciones que mejoran además la reputación de la empresa deberían incluirse en el horario laboral, como decimos, es verdad que nada impide que las empresas promuevan el voluntariado para el tiempo libre de sus empleados a través de acuerdos con entidades reconocidas de carácter social o medioambiental, pero sin forzar a éstas a jornadas fuera de sus actividades habituales que sean más un perjuicio para satisfacción de las compañías que un apoyo solidario.

En la “Radiografía del voluntariado corporativo en España” de Voluntare Red de Voluntariado Corporativo se hace énfasis además en que estas acciones cambian el comportamiento del empleado hacia su empresa de forma significativa: los trabajadores que participaron en actividades voluntarias corporativas experimentaron un aumento del 20 por ciento en su compromiso laboral respecto al grupo de control, un 33 por ciento de  incrementó del sentido del propósito en el trabajo, más de un 18 por ciento de aumento del orgullo sobre los productos de la empresa y sus servicios y creció en un 13 por ciento su satisfacción laboral.    

E 65% de las empresas de todos los sectores en nuestro país ya cuenta con un programa de voluntariado corporativo alienado con el negocio, según recoge el citado informe de la Fundación Adecco. Este documento pone de manifiesto lo que vivimos en Envera, que “la personas con discapacidad son el target más estratégico, desarrollando el 78% de las compañías acciones de voluntariado centradas en este grupo de interés”.

“Emocionante”, “increíble”, “inesperado”, “sorprendente” o “extraordinario” son algunos de los adjetivos con que los voluntarios que conviven en Envera califican su experiencia. Donde antes sólo habían visto “discapacitados” o “minusválidos”, interactuar con personas con las que nunca antes habían tenido contacto les permite descubrir en ellas a magníficos profesionales y seres humanos excepcionales, con cualidades y habilidades desconocidas. El voluntariado corporativo les permite ver y comprender.  Porque más allá de que el voluntariado corporativo ayude a plantar un huerto o a reciclar cápsulas de café, en Envera somos conscientes de que lo importante es el conocimiento que generan estas acciones sobre una realidad que afecta a mil millones de personas en el mundo y de la que nadie está libre. Comprender es crucial para incluir tanto social como laboralmente.

Hoy, como recogen todas las investigaciones mencionadas, el voluntariado corporativo se ha instalado y consolidado en la agenda empresarial española, representando una poderosa herramienta de gestión que permite generar conexión con la comunidad y generar valor añadido interno.  Ya no se trata de una práctica filantrópica o caritativa, sino de un pilar de competitividad sobre el que el 65 por ciento de las empresas levanta objetivos y áreas de actuación alineadas con su estrategia empresarial y de sostenibilidad.

La fiebre del voluntariado corporativo contagia el tejido empresarial español y enciende en cada trabajador voluntario la idea de que todos hacemos falta, que todos los apoyos son necesarios, que colaborar en mejorar la vida de la gente es gratificante. Como dijo uno de los cien voluntarios de Telefónica que Envera acogió el pasado mes de junio: “Me habéis llenado el día por completo y ahora me voy a mi casa con una sonrisa a contarles a mis niñas y mi chico lo que he disfrutado aquí con vosotros”. Porque los voluntarios corporativos dan mucho, pero se llevan más, creando un efecto multiplicador que ayuda a construir el alma sólida de las mejores empresas y la fortaleza invencible de las sociedades.

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