Para la ponente, el autoconocimiento es “esencial”, porque “la gente no se conoce a sí misma” y siente vacío a lo desconocido y a lo nuevo. “Hay que darles la vuelta a los miedos y adquirir nuevas competencias”, destacó, dado que ahora se reclama un liderazgo más innovador, con motivación y personalidad. “Es una cuestión de actitud”, dijo citando al industrial Henry Ford, quien declaró: “Tanto si crees que puedes como si crees que no puedes, estás en lo cierto”.
En el contexto actual, dominado por las tecnologías exponenciales como Blockchain, IoT, los gemelos digitales, y marcado por retos como la descarbonización o la transición digital, serán determinantes el upskilling (perfeccionamiento) y el reskilling (reinvención). De hecho, los datos que maneja Pérez-Hurtado indican que hasta 2025 el 50% de los puestos evolucionará y necesitará una reinvención total.
¿Y qué tipo de capacidades son necesarias para superar este reto?, se preguntó. Conocimientos, habilidades y competencias. Y entre estas últimas, la más importante, consideró, es el aprendizaje continuo.
¿Y cuáles son los perfiles más demandados? “Las ardillas púrpuras, llamadas así por su rareza, perfiles híbridos que combinan tecnología con humanismo. “Otro punto importante es el ecosistema emprededor/inversor” y también lo son los knowmads, personas nómadas del conocimiento, expertas en un tema, a la última y conectadas.
En este ecosistema tecnológico, Pérez-Hurtado enumeró las cuatro etapas del “viaje hacia la reinvención” que debe hacer el industrial:
- Conocerse a sí mismo, las fortalezas y los miedos.
- Entender el contexto, formarse y aprender nuevas competencias (upskilling y reskilling).
- Buscar y encontrar un hueco, un nuevo rol donde ser feliz.
- Identificar tu propósito de la vida, tu razón de ser o ikigai, un concepto japonés.