El complejo contexto político, las restricciones de la oferta y la crisis climática, explicó, han aumentado los costes de la energía, cuya producción y consumo suponen el 80% de las emisiones de CO2. Los altos precios centran la atención en la eficiencia energética.
La amortización de las inversiones en electrificación y en energías renovables se ha reducido exponencialmente; para las empresas industriales más avanzadas todo esto representa una oportunidad de aumentar su rentabilidad a corto plazo y una oportunidad competitiva a medio y largo plazo, acelerando su carrera hacia el net zero, enfatizó.
¿Cuál es la visión de Schneider ante esta crisis energética? “Nosotros creemos en la creación de un mundo industrial eficiente, resiliente y sostenible que sea capaz de adaptarse a los cambios de la demanda, a las disrupciones en las cadenas de suministro, a las nuevas tecnologías y a las normativas”, subrayó la ejecutiva.
“A pesar del complejo contexto geopolítico y ambiental, en Schneider Electric sabemos que es posible crear esa industria, aprovechando las nuevas tecnologías y adoptando una nueva estrategia a través de la Electricidad 4.0”, añadió Olga García.
Pero ¿qué es la Electricidad 4.0? “Todos debemos replantearnos nuestra relación con la energía para hacerla sostenible e inteligente. Ser sostenible significa ser más eléctricos y ser inteligentes significa ser más digitales. La electricidad 4.0 representa la convergencia de lo eléctrico y lo digital a gran escala”.
En la industria, la electrificación puede cambiar las reglas del juego, gracias a la transformación de la producción de calor. Las tecnologías actuales podrían electrificar hasta el 78% del calor en la industria, estimó García en su charla a la audiencia de industry TALKS.
García también enumeró las ventajas de la electrificación en los procesos industriales:
- Reduce las emisiones de los gases de efecto invernadero.
- Puede ayudar a reducir los riesgos de paradas en la producción a través de las microgrids onsite.
- Los procesos eléctricos son siempre más eficientes energéticamente que los que usan combustibles fósiles.
- Actualiza la tecnología y los componentes de los equipos.
- Los costes de mantenimiento de los equipos eléctricos suelen ser menores porque la vida útil de los componentes es más larga y hay menos desgaste.
- La electrificación de los procesos depende de la tecnología digital, como los sensores y los mecanismos de control, que pueden abrir nuevas posibilidades para las operaciones a distancia.
“Debemos ser capaces de lograr un cambio estructural mediante la electrificación y la digitalización. Esta convergencia es lo que llamamos Electricidad 4.0. Las tecnologías para hacerlo ya están aquí, y nos permiten ser más competitivos, más sostenibles y más resilientes como sociedad”, manifestó a modo de resumen.
