Para Nuñez, la clave para que Principia sea lo es y esté donde está se debe al uso de las herramientas digitales que existían en cada momento. Principia es una empresa pionera en internet que empezó como consultora industrial en 1979. Actualmente ofrece la distribución e implementación de soluciones digitales para la innovación industrial. Soluciones para el diseño, para la gestión de vida de producto y más recientemente la introducción de entornos colaborativos de trabajo, capaces de conectar todas las áreas involucradas en un proyecto de ingeniería para el desarrollo de un nuevo producto.
Núñez desgranó una serie de reflexiones y recomendaciones muy interesantes:
- La digitalización es una transformación de la cultura organizativa, un cambio en cómo actúan las personas. Por tanto, las personas son la clave de la transformación digital y las herramientas deben facilitarla.
- Aproximadamente un 80% de un proyecto de transformación digital es pura gestión del cambio.
- Lo importante es que quien lidere el proyecto dentro de la empresa tenga claros los conceptos: qué, cómo, cuándo y sobre todo por qué.
- Esta persona debe ser un líder dentro de la compañía, con una visión suficientemente transversal de la misma que acompañe y guíe a todas las partes involucradas, marque los tiempos y sea capaz de eliminar sus propios sesgos para beneficio del objetivo. Que aborde el proceso desde una actitud serena y conciliadora.
- Externamente es imprescindible contar con socios capaces de entender la idiosincrasia propia de la empresa y los procesos que se van a ver afectados y las herramientas que se implanten.
- No existen fórmulas mágicas, ni objetivos inalcanzables, y es necesario ser conscientes de que el error es parte del proceso.
- La comunicación fluida, la escucha activa, y entender la relación esfuerzo beneficio son elementos cruciales también.
- No se trata de adaptar las herramientas a los procesos que ya existen. Un proyecto de transformación digital es la oportunidad ideal para revisar cómo se trabaja y aplicar mejoras.
- El futuro digital está en la nube. Optar por ella reduce considerablemente el coste de implantación y mantenimiento asociados a los proyectos de transformación digital. Las objeciones sobre seguridad, comprensibles, no son tales con los entornos actuales.
- La transformación digital es factible y abordable para todo tipo de empresas: grandes y pequeñas. Sólo hay que ordenar prioridades, marcar objetivos y lanzarse. De la mano de los colaboradores adecuados el riesgo y el vértigo se comparten y el proceso resulta más fácil.
