La ponente relató, desde su trayectoria personal, los ¡zascas! que ha ido sufriendo como emprendedora desde 1995 hasta la actualidad en un mundo cada vez más globalizado. Ese hilo conductor le sirvió para contar los efectos de la crisis financiera de 2008: aquello fue “brutal en mi sector y tocaba reinventarse”, admitió la participante en el XIII ciclo de ponencias de industry TALKS. “El marketing había evolucionado muchísimo. Me tocó reconocer la situación”
Después de un momento de relocalización y con la vuelta de las marcas de lujo, en 2011 funda Lacambra, apostando por la artesanía comercial online, la pequeña producción y la competencia frente a las grandes cadenas. Su claim es hecho en España y se mueve entre el low cost y el lujo. En 2017 abre tienda física en Madrid.
El siguiente revés viene, por supuesto, con la pandemia del COVID-19. Los planes de Cristina Álvarez de abrir tiendas en zonas turísticas “se volatilizaron” por completo. Y luego llegó la guerra en Ucrania…
Por eso, concluyó, hay que adaptarse al cambio, “que está ahí”, lo queramos o no. Y como herramienta planteó lo siguiente: “Tenemos que ver constantemente las señales del cambio”.