Así arrancó su conferencia para industry TALKS Francisco Javier Laclaustra, responsable de Desarrollo de Negocio en la Escuela de Emprendimiento y Desarrollo Empresarial (EDE).
Para él, la industria tiene retos que giran alrededor del capital humano. De hecho, según Deloytte, para 2024 2,4 millones de puestos de trabajo quedarán sin cubrir en el sector manufacturero estadounidense por falta de capacitación especializada del personal. Esa tendencia, dijo Laclaustra, se extrapola a otros mercados industriales desarrollados como el español.
Aquí, subrayó, “no solo hay falta de capital humano cualificado para la industria, sino que la falta de capital humano es generalizada en el sector, algo motivado tanto por el envejecimiento de la población como por la terciarización de la economía, lo que supone la caída en las tasas de reposición a lo largo de años”, declaró.
Se podría paliar este hándicap con la aplicación de la industria 4.0, la robótica y la automatización, pero para llevar a cabo los necesarios procesos de transformación industrial se requiere personal capacitado. “La industria se encuentra en un círculo vicioso que hemos de romper”.
A todo esto, enfatizó Laclaustra, se suma un sector educativo “que carece de suficiente dinamismo para adaptarse con velocidad a las necesidades cambiantes del mercado laboral”. La educación arrastra problemas como la desactualización de los contenidos, la falta de métodos prácticos, la falta de flexibilidad de los programas, entre otros.
“Se espera que la educación sea cada vez más práctica, flexible, personalizadas y especializada, y que esta formación venga avalada por microcredenciales que certifiquen a sus alumnos sus conocimientos en temáticas específicas, así como en la utilización de determinadas herramientas”, manifestó el nuevo iTALKER.
En este contexto nació la escuela EDE, que apuesta por soluciones formativas basadas en la flexibilidad, la eficiencia, la practicidad, la especialización y la personalización.