La estrategia del presidente Zelenski en su ronda de intervenciones con los distintos Parlamentos de señalar compañías que mantienen presuntamente sus relaciones con Rusia no ha sido única en España. Días antes, una declaración similar en Francia con respecto a Renault y la crisis de imagen resultante provocó que la multinacional automovilística cesara su actividad en Rusia.
Porcelanosa ha respondido inmediatamente ante la manifestación del presidente ucraniano asegurando a través de sus canales oficiales que “desde que comentó el conflicto, no se ha iniciado ningún proceso de venta nuevo, bloqueando la totalidad de transacciones comerciales con Rusia”. Igualmente, el grupo ha comentado que ha realizado acciones dirigidas a ayudar al pueblo de Ucrania con envíos de material sanitario, ropa y alimento. Asimismo, han informado de que “continuamos y continuaremos brindando ayuda, apoyo y amparo a ciudadanos ucranianos que no pueden regresar a su país”.
Por su parte, la asociación Sercobe finalmente emitió un comunicado a través de la agencia de noticias Europa Press en el asegura cumplir “rigurosamente la legalidad internacional, siendo uno de los referentes principales ante la Administración española en todos los temas regulatorias y de normativa”. De hecho Sercobe pertenece al Foro de Alto Nivel de la Industria Española, creado el 11 de diciembre de 2020 como un órgano de carácter consultivo, asesor y de colaboración entre las Administraciones Públicas y las organizaciones empresariales y sindicales para abordar la nueva política industrial.
La asociación ha indicado que ha mantenido contactos con licitaciones de contratos internacionales en Rusia mientras que su mercado se encontraba abierto y permitido. Con todo, asegura que Sercobe ya había reducido su actividad en la Federación rusa desde la anexión de Crimea en 2014, centrándose en sectores no sancionados por la comunidad internacional. La web de Sercobe se ha mantenido durante horas deshabilitada.
Por su parte, el grupo Maxam, multinacional proveedor de sistemas para Defensa y Seguridad, así como soluciones de voladura para uso en minería e infraestructuras públicas, cuenta con varias filiales en Rusia. En relación a su situación en España, lleva desde febrero de 2020 negociando EREs en las plantas de Madrid, Vizcaya y Burgos que afectan a más de 100 empleados. Hasta el momento, ha reusado hacer ninguna declaración e, igualmente, la página web de la filial española se mantiene inoperativa.