Las grandes potencias mundiales como Estados Unidos y la Unión Europea se están planteando un rediseño de sus políticas industriales para reducir dependencias del exterior que pueden ser claves para su economía y este nuevo informe tiene como objetivo demostrar que España puede jugar un papel importante dentro del proyecto europeo de reindustrialización. En él, se analiza sobre cómo se podrían atraer nuevas industrias al país y también se realiza un recorrido sobre qué es la globalización y cuáles han sido sus efectos en las últimas décadas, tanto positivos como negativos. “No debemos olvidar que España tiene un marco legal robusto y que es supervisado por la Unión Europea, otorgando a nuestro país y empresas un alto grado de protección jurídica”, ha recordado Francisco Cobo, autor de informe y el encargado de presentarlo en el acto.
Francisco Cobo, miembro del Instituto Español de Analistas y economista de BNP Paribas, ha
sido uno de los expertos que ha debatido las principales conclusiones en una mesa de debate, moderada por Alfredo Jiménez, director de análisis del Instituto, y en la que también han participado Javier Santacruz, investigador de la entidad y Luis Pinheiro, economista del departamento de Planificación y Estudios de CaixaBank.
Al inicio del acto, también ha intervenido el director general del Instituto Español de Analistas, Javier Méndez, quien ha aprovechado para felicitar por su “excelente” trabajo a Francisco Cobo y ha recordado que “la teoría económica nos muestra que España puede y debe convertirse en un jugador destacable dentro de los planes europeos, pero ello va a requerir de una voluntad política firme, siendo nuestra clase política la que deberán acometer estas reformas de manera consensuada y consistente a lo largo del tiempo”.
Cómo fomentar la relocalización de la industria en España
Las recientes interrupciones de la cadena de suministro relacionadas con la pandemia, la guerra de Ucrania, el aumento de los costes de transporte, el riesgo arancelario y otros factores geopolíticos, platean numerosas dudas sobre el futuro de la globalización, o de al menos de la forma en que la conocemos ahora. La nueva realidad puede hacer necesaria una relocalización de la actividad productiva hacia España, hasta ahora ubicada en países emergentes. “Nuestro país tiene menores costes de producción que nuestros países vecinos de centro Europa, pero más elevados que los países que recientemente se han incorporado a la Unión Europea. Por ello, nuestro país deberá realizar una revisión de los costes salariales con el objetivo de ser más atractivo”, ha recomendado Javier Santacruz, en su intervención en la mesa de debate. Para fomentar la relocalización de la industria en España, en el informe elaborado desde el Instituto Español de Analistas se apuesta porque España construya un marco legislativo favorable, así como incremente el gasto en I+D, además de acometer reformas en la educación para orientar a la población activa hacia la nueva industria; mejorar la burocracia facilitando el acceso a la financiación y constitución de empresas y estimular alianzas públicoprivadas.
En cuanto a los efectos que tendría la reindustrialización en la economía española, los expertos
coincidieron en que a largo plazo supondría un incremento del PIB. “Si fomentamos la industria, aumentaría las rentas familiares, generando mayor consumo y ahorro”, explica Luis Pinheiro, economista del departamento de Planificación y Estudios de CaixaBank. “Aumentando el consumo, a su vez se genera una retroalimentación en la industria provocando sinergias. Los excedentes productivos podrían exportarse y el Estado, podría aumentar su recaudación mediante IRPF, IVA y cotizaciones, además de poder ahorrar en prestaciones de desempleo”, añade Pinheiro. Otro de los aspectos clave de los que se ha debatido es la importancia de legislar con el fin de atraer un mayor número de empresas hasta territorio español. Esta legislación, a su vez, debe considerar cuatro factores clave: educación, energía, fiscalidad y sostenibilidad. “Su posición geográfica y ventaja natural para la producción de energía renovable junto con una infraestructura de primer nivel puede ayudar a impulsar la industria de cero emisiones”, recordó Cobo.