Además, según datos de la Dirección General de Consumo, el Centro de Investigación y Control de la Calidad realizó en 2022 41.170 ensayos a muestras de productos alimenticios e industriales procedentes de las campañas nacionales y autonómicas de vigilancia de mercado (58 en total), las campañas de la UE y demás controles oficiales, concluyendo que el 84,31% eran conformes a la normativa aplicable. Los defectos más frecuentes detectados para ambas categorías de productos fueron el etiquetado y presentación, aspectos de seguridad y factores de calidad.
En cuanto al sistema de Red de Alerta de productos de consumo no alimenticios, en 2022 gestionó 2.865 notificaciones, 713 generadas por las Comunidades Autónomas y 2.152 recibidas de la UE. Madrid fue la Comunidad con más notificaciones (175), seguida de Cataluña (126), Galicia (111), Andalucía (79) y Baleares (62). En su mayoría, casi el 61%, procedían de Asia.
El Informe Anual 2023 de vigilancia de mercado recoge los datos relativos a las actuaciones llevadas a cabo durante 2022. Ha sido elaborado en colaboración con más de 40 organizaciones empresariales españolas, el Ministerio de Industria y Turismo, el Ministerio de Consumo, y diferentes Autoridades con competencia en vigilancia de mercado.
De esta forma, se pretende “sensibilizar sobre la comercialización de productos y servicios inseguros o que induzcan a confusión, que provocan un perjuicio a la economía, empresas y consumidores, además de una competencia desleal y una distorsión del mercado”.