El documento indica que el 87,3% de las empresas encuestadas son de 1 a 50 trabajadores y el 12,7% restante son empresas entre 50 y 250 trabajadores.
En cuanto a las empresas que aseguran que no han sufrido consecuencias, reconoce que es algo probablemente temporal. El 47,3% no ha visto afectada su producción o sus servicios, frente al 52,7% que declara que sí se ha visto mermada su producción debido a la falta de suministros de materias primas y al aumento de los precios. El 45,4% de las empresas del Metal declaran que la factura de la luz ha subido entre un 30% y 50%.
En el mismo informe señalan que como medida preventiva el 27,3% acumula gran cantidad de suministros y materias primas, el 21,8% aumenta los precios, el 9,1% ha reducido personal, el 1,8% ha reducido el número de horas al personal y mientras el 1,8% ha cambiado de proveedores. Sin embargo, el 38,2% no ha tomado ninguna medida, hasta el momento.
Cabe destacar que la mayor parte de las quejas de los asociados están relacionadas con la subida del carburante, la luz, las materias primas y el abandono por parte del Gobierno central y autonómico del sector privado.
