El secretario de Empresa y Competitividad, Jaume Baró, ha asegurado que “el Departamento de Empresa y Trabajo, a través de la Dirección General de Industria, impulsa este nuevo instrumento para intentar que las pymes encuentren su financiación cuando tienen un proyecto con viabilidad económica, financiera e industrial”.
Para la consejera delegada de Avalis de Catalunya, Anna Alvarez, “este nuevo instrumento de financiación es un paso adelante para asegurar que las pequeñas y medianas empresas industriales en Cataluña que tengan proyectos viables puedan acceder a la financiación necesaria en las mejores condiciones. Es una oportunidad para contribuir a la mejora de la competitividad del tejido empresarial catalán”.
El Departamento de Empresa y Trabajo destinará 1,1 millones de euros que permitirá realizar aportaciones de capital en nombre de la empresa industrial y para contribuir a la garantía recíproca que exige toda SGR, generando un importe máximo esperado de préstamos de 39 ,5 millones de euros. Los proyectos beneficiarios deben incidir en la necesaria transformación del sector industrial en Cataluña y en la creación o el mantenimiento de un empleo de calidad.
En concreto, deben cumplir un mínimo de cinco de los siguientes criterios: La digitalización de la industria; el incremento o mantenimiento de la capacidad productiva; la creación o el mantenimiento del empleo; la dinamización de la actividad en la cadena de valor, especialmente en lo que se refiere a los proveedores locales; la contribución al reequilibrio territorial en materia industrial; la reindustrialización de instalaciones productivas, objeto de procesos de cierre o deslocalización empresarial; la nueva implantación industrial; impulso de la utilización de residuos como recurso productivo en el marco de la economía circular; contribución a la descarbonización del proceso productivo sustituyendo fondos de energía de combustibles fósiles por energía limpia y reducción del consumo del agua del proceso productivo por un mismo volumen de producción que al menos implique situarse en un nivel de consumo por debajo de la media de su sector industrial.