Esta cifra supone el 25% de incremento respecto al año anterior y un incremento medio anual del 8,2% en los últimos cinco años. Proteger los resultados de la investigación a través de los distintos títulos jurídicos a tal efecto, como patentes o modelos de utilidad, es un procedimiento indispensable para que el sistema sanitario obtenga retorno económico sobre las inversiones realizadas con fondos públicos que, a su vez, revierten en beneficios a la ciudadanía. Patentar una invención supone, además, el reconocimiento para su autor y un valor añadido al desempeño de su actividad.
La Oficina de Transferencia de Tecnología se encarga de que las invenciones e innovaciones de los profesionales se incorporen a la práctica clínica y al mercado. La transferencia de tecnología en al ámbito de la I+D+i en Salud es un aspecto clave y una pieza fundamental para que el trabajo de la comunidad investigadora e innovadora de la sanidad pública de Andalucía llegue a pacientes y usuarios.
En este sentido, la Oficina de Transferencia de Tecnología, coordinada desde la Fundación Progreso y Salud, “desarrolla una labor para garantizar que las invenciones e innovaciones de los científicos vinculados a la sanidad pública se incorporen a la práctica clínica, al mercado y, como fin último, a la sociedad en general. Su trabajo se centra en asesorar, apoyar y acompañar a los investigadores en el proceso de transferencia de sus innovaciones al sector empresarial”.