Cataluña, junto con Madrid, es una de las provincias donde la industria tiene mayor peso en la economía, aunque el sector solicita incrementar su importancia, ¿cómo tratan de abordar esto?
El Govern de Catalunya tiene como una de sus prioridades incrementar el peso de la industria en la economía del país y mejorar su competitividad, resiliencia y valor añadido, y reforzar aún más su internacionalización. Es un sector que impulsa a otros sectores productivos y ofrece empleo más estable, de más calidad y con mejores salarios. En definitiva, la industria vertebra el territorio. Por este motivo, en esta legislatura hemos impulsado el segundo Pacto Nacional para la Industria 2022-2025 que nos permite trabajar en un marco de estabilidad para recuperar peso industrial.
¿Cuáles son los proyectos más destacables de la industria en Cataluña?
Como le comentaba el Pacto Nacional para la Industria es el instrumento clave que nos servirá para impulsar la transformación del sector y, con él, la transformación verde, digital, socioeconómica, feminista y justa de Catalunya; porque la mejor política industrial es la que existe y orienta al conjunto del país a los intereses colectivos compartidos. En este sentido, el Govern invertirá más de 3.000 millones de euros para relanzar y transformar el modelo industrial del país y lo hará a través del desarrollo de las 152 medidas previstas en el Pacto. El objetivo es que el año 2030 la industria represente el 25% del PIB.
Uno de los factores más relevantes en esta materia es el relacionado con el suelo, ¿tienen previsto ampliarlo?
La idea es que Cataluña disponga de un mejor equipamiento de infraestructuras, tanto físicas como digitales, así como de una adecuada disponibilidad de suelo industrial, que permita aumentar la productividad industrial, vertebrar el territorio y favorecer la atracción de inversiones. En el Pacto Nacional para la Industria se incluye, entre otras medidas, disponer de sectores de suelo industrial situados en áreas de alta demanda y crecimiento económico y vinculados a los centros de investigación y tecnología del país. Está previsto destinar unos 21,9 millones de euros.
Las pymes industriales reclaman ayudas para poder ser competitivas, ¿qué políticas llevan a cabo desde la comunidad para atraerlas?
Este año hemos puesto en marcha dos líneas de ayudas de apoyo a proyectos industriales priorizando a las pequeñas y medianas empresas, que cuentan con una dotación de 17 millones de euros.
Las dos líneas de ayudas activadas por la Dirección General de Industria son: una de apoyo a proyectos de reindustrialización y compra de unidades productivas en situación de dificultad, dotada con siete millones de euros y otra de proyectos de inversiones productivas que mejoren la competitividad, la sostenibilidad ambiental y la digitalización de las empresas industriales, que cuenta con diez millones de euros de presupuesto.
Estas líneas se complementarán durante el año 2023 con 20 millones de euros más, a cargo de los presupuestos de este año, para poder incentivar y dar apoyo financiero a múltiples proyectos que contribuyen a la transición sostenible y digital de los procesos productivos industriales y la reindustrialización.
Las compañías industriales quieren ser sostenible pero no a cualquier precio, ¿qué medidas promueven en este sentido?
El Govern tiene como objetivo impulsar la transición verde de la industria y sabemos perfectamente que actualmente está haciendo frente a grandes desafíos. Por este motivo, en los presupuestos de la Generalitat de Catalunya de 2023 hay una clara priorización de las políticas industriales ya que fija un incremento del 75% de la cifra destinada a este sector, pasando de los 126 a los 220 millones de euros. Estamos al lado de la industria porque nuestra prioridad como Govern es reindustrializar Catalunya.
La falta de talento en el sector es uno de los principales problemas, ¿cómo fomentan la atracción de talento a la industria catalana?
Este es uno de los puntos importantes del Pacto Nacional para la Industria. El objetivo es mejorar la capacitación de los trabajadores y trabajadoras a través de la formación profesional, la formación continua, el emprendimiento y la formación universitaria, que den respuesta, de calidad y flexible a las necesidades de las empresas y la sociedad. En este sentido, se impulsará la Formación Profesional Ocupacional Dual y acciones de formación no formal de calificación y recalificación de la población activa.
En cuanto a los PERTE, ¿cómo valoran su gestión y que impacto están teniendo en la industria de su comunidad?
El Govern de Catalunya ha reclamado activamente al Gobierno español el traspaso de la gestión de los fondos del plan de ayudas europeo Next Generation. Creemos que no se están cumpliendo las expectativas creadas por las empresas ni tampoco las de la Generalitat de Catalunya. Estamos seguros que Catalunya ha de poder gestionar los recursos de los Next Generation. En cualquier caso, mientras este traspaso en la gestión no sucede, la Generalitat de Cataluña ha puesto en marcha una oficina específica para asesorar a las empresas con sede operativa a Cataluña y acompañarlas en el complejo proceso de identificar, comprender y aprovechar las múltiples oportunidades de financiación que ofrecen los PERTE y otros instrumentos dotados de fondos Next Generation EU.
Con respecto a las energías sostenibles, ¿qué potencial tiene Cataluña para su implantación?
El Govern trabaja activamente para acelerar la implantación de energías renovables y, al mismo tiempo, para que esta implantación se haga de forma equilibrada en el territorio, con el máximo respeto a la biodiversidad y con el máximo retorno para el entorno donde se instalen. En este sentido, se han puesto en marcha programas que incentivan la demanda (descarbonización de la industria) y también la oferta (adopción de nuevas tecnologías y provisión de fuentes de energéticas renovables).
¿Qué planes tiene previstos para el futuro de la industria catalana?
Como he ido comentando durante la entrevista el objetivo es que el año 2030 la industria represente el 25% del PIB. La motivación fundamental detrás de esta cifra radica en el hecho demostrado que las economías más competitivas y los países más prósperos cuentan con un sector industrial relevante y con un peso global que se sitúa en este orden de magnitud. Trabajamos para reindustrializar Catalunya y en este sentido, en el último año el Departament d’Empresa i Treball ha trabajado en diferentes mesas de reindustrialización que han culminado exitosamente. Éste es el reciente caso de Nissan, en el que la solución combina la presencia de dos fabricantes de vehículos eléctricos, el Hub de Electromobilidad y Silence, con una parte de actividad logística a través de la empresa Goodman, a la que se ha adjudicado la gestión de los terrenos de la Zona Franca. Por su parte, Nissan mantendrá su centro de diseño en la zona.
Pero el Govern también trabaja activamente en la captación de inversiones extranjeras estratégicas. Una de las operaciones que destacan es la atracción de la empresa ILJIN que invertirá 600 millones de euros y creará 500 puestos de trabajo con la apertura de una planta de producción en Mont-roig del Camp desde donde fabricará un componente básico de las baterías de litio.
Seguiremos trabajando en esta dirección para conseguir el objetivo marcado.
