El proyecto fue propuesto por la vicelehendakari y consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia en los primeros presupuestos de esta legislatura, para evitar perder talento y la experiencia de personas despedidas por la adaptación de las empresas a las grandes transformaciones económicas y sociales. Asimismo, trata de encontrar empleo en los sectores donde se siga contratando, un programa integral de atención temprana para evitar que se deterioren las condiciones de empleabilidad y, a la vez, dar respuesta a las necesidades de las empresas.
Dicho programa fue financiado en 2021 por la CAPV, consiguiendo la recolocación de 108 personas trabajadoras en la primera experiencia piloto, lo que supone un índice de intermediación efectiva de un 44% muy superior al habitual en los servicios públicos.
Al tratarse de un programa nuevo, Lanbide puso en marcha un equipo específico conformado con 12 personas que quisieron participar voluntariamente y que recibieron formación específica para ejercer la labor orientadora y prospectora. Ese equipo identificó a empresas y trabajadores, y comenzó el lanzamiento de invitaciones a la participación.