SEGÚN COIIM

España producirá un sobrecoste del suministro eléctrico de más de 3.000 millones de euros en las compañías electrointensivas

España producirá un sobrecoste de más de 3.000 millones de euros con respecto a países como Alemania o Francia, en el suministro eléctrico de las compañías electrointensivas, según indica el informe del COIIM, Colegio de Ingenieros Industriales de Madrid. Los expertos del COIIM proponen una serie de medidas para desacoplar el precio de los combustibles fósiles de la fijación de la tarifa eléctrica.

El Colegio y la Asociación de Ingenieros Industriales de Madrid consideran urgentes que el Gobierno otorgue prioridad a resolver la falta de viabilidad del negocio de las industrias electrointensivas debido a los elevados precios del gas y electricidad, agravados por la invasión de Ucrania.

El COIIM propone una serie de medidas inmediatas, a corto y a medio plazo para resolver esta problemática, que pasan en el plazo inmediato por desacoplar el precio de los combustibles fósiles de la fijación de la tarifa eléctrica en el mercado, establecer una política de reducción de cargos de la tarifa similar a la que se aplica a competidores en Alemania o Francia, y convocar subastas de tecnología inframarginal (nuclear, hidráulica y renovables) que están recogidas en el RDL 17/2021 y que, supuestamente, deberían haberse realizado en el pasado año.

Asimismo, muchas industrias de sectores electrointensivos como la siderurgia, metalurgia no férrica, química y gases industriales, se están viendo afectados o se han visto obligadas a paralizar la producción, ya que los precios del gas y la electricidad hacen imposible mantener la actividad. Compañías como Acerinox, ArcelorMittal, G.Celsa, Feroatlántica, Megasa, ferroglobe y Siderúrgica Balboa ya han tenido que parar algunas de sus instalaciones y, de seguir así, se verán obligados a poner en marcha expedientes de regulación temporal de empleo (ERTES) y posibles deslocalizaciones de producción.

En cuanto a la Unión Europea vive en una crisis sin precedentes y en estos momentos deben adoptase medidas de emergencia. En España, más del 80% del consumo industrial está expuesto a los precios del gas y del mercado eléctrico diario, que han ido creciendo desde un 60% hasta representar un 75%; valores evidentemente insostenibles. Desde la publicación del Manifiesto por la Industria Electrointensiva española el pasado 1 de diciembre, han transcurrido más de tres meses sin que se hayan adoptado medidas efectivas que reviertan la situación y mejoren las perspectivas de nuestras industrias, tal y como indica el informe del COIIM.

Medidas propuestas por el COIIM

De cara a las medidas inmediatas que los ingenieros industriales de Madrid proponen para solucionar los problemas expuestos encontramos reformar por lo menos hasta el 30 de junio de 2022, y de ser posible y permitido por la Comisión Europea, hasta el 30 de setiembre de 2022, el mercado marginalista eléctrico desacoplando el precio de los combustibles fósiles (gas y carbón) de la fijación de la tarifa eléctrica en el mercado; establecer una política de reducción de cargos de la tarifa similar a la que beneficia a los competidores alemanes y franceses para que las industrias españolas mejoren su base competitiva; y convocar las subastas de tecnología inframarginal (nuclear, hidráulica y renovables), que recordamos estaban recogidas en el RDL 17/2021 y que, supuestamente, deberían haberse realizado en el pasado año 2021.

En cuanto a las medidas a corto plazo pretenden materializar el acuerdo que el Gobierno alcanzó con las compañías eléctricas en diciembre de 2021 y que sigue pendiente, para ofrecer a la industria electrointensiva contratos bilaterales a precios competitivos, es decir, anteriores a la crisis del gas natural; materializar la propuesta del Ministerio de Transición Ecológica de ofertar la energía del RECORE a un precio regulado que alivie la crisis de las industrias; dedicar el incremento de recaudación por derechos de emisión de CO2 e impuestos sobre el gas natural y la electricidad a aliviar los problemas expuestos, siempre cumpliendo la normativa de la Unión Europea (UE), sin olvidar la reducción de las tarifas, en particular la de los consumidores más vulnerables. Esta medida paliaría el problema sin afectar a la recaudación presupuestada en los PGE.

Además, también entran dentro estas medidas a corto plazo materializar una subasta de energía eléctrica organizada por los consumidores electrointensivos para permitirles un incremento de contratos a largo plazo (PPA) y dinamizar los trámites asociados con los mismos; permitir a los grandes consumidores industriales el acceso a los mercados del resto de la UE para sus contratos a plazo, lo cual introduciría más competencia; diferir en algunos meses la traslación al mercado minorista PVPC e industrial de las variaciones de precio del mayorista sin engrosar el déficit de tarifa existente; y poner en marcha las actuaciones del PERTE de descarbonización de la industria electrointensiva teniendo en cuenta que para emprender nuevas inversiones estas industrias necesitan tener resuelta su viabilidad económica.

Por último, las medidas a medio y a largo plazo se basarían en reforzar el mercado secundario para que sirva de referencia al minorista y así se amortigüe la volatilidad en la traslación de precios al mercado minorista; reforzar el compromiso y las actuaciones para que en 2025 se haya completado la interconexión eléctrica submarina por el Golfo de Vizcaya, lo cual elevaría la interconexión con Francia a un 5% y también las de los Pirineos, de modo que en 2030 se alcance el 10% y mejore así la integración con el mercado francés; y reformar el mercado mayorista para amortiguar su volatilidad.

Total
0
Shares
NOTICIA ANTERIOR

ASPAPEL desarrolla una campaña de captación de talento para la industria papelera

NOTICIA SIGUIENTE

El Servicio de Empleo Vasco recibe 1,2 millones de euros de financiación europea para reforzar el programa Aukeraberri

NOTICIAS RELACIONADAS