Dicha asociación, advierte de la imposibilidad material de acceso a puertos y fábricas e incluso acciones de sabotaje que pueden conducir a la paralización de la industria y de la distribución de productos esenciales a los ciudadanos.
Desde esta plataforma, se solicita la intervención urgente de la Administración, y en particular del Ministerio del Interior, para garantizar el respeto a la actividad empresarial voluntaria y a la libre circulación de mercancías. En este sentido, la industria apela a la responsabilidad, para que el paro en el transporte no implique la obstaculización de la producción, y llama al escrupuloso respeto a la legalidad.
En el caso particular de la siderurgia, UNESID destaca que el paro afecta al ecosistema de proveedores, siendo en muchos casos pymes con dificultades para afrontar este tipo de situaciones.
Dicha agrupación empresarial asegura que la economía española y el sector siderúrgico se enfrentan a una situación complicada, como consecuencia de la crisis energética y la guerra de Ucrania. Asimismo, los problemas en el transporte por carretera añaden una dificultad más a la muy grave generada por el precio de la electricidad, suponiendo un retraso en la recuperación de la actividad.