Fue usted uno de los pioneros en propagar la necesidad de ser responsables entre las empresas. ¿Cómo han cambiado las cosas en estos años?
Siempre se puede ver el vaso medio lleno o medio vacío. Yo siempre lo veo medio lleno, siempre soy positivo aunque también realista. No tengo ninguna duda de que todo lo relacionado con la responsabilidad social y la sostenibilidad y su forma de comunicarla han cambiado bastante en estos casi 20 años desde que fundé Corresponsables, aunque también soy consciente de que falta mucho por mejorar.
Sobre todo ha cambiado el número de organizaciones interesadas en estos temas, cada vez mayor y de todo tipo, tamaños y sectores, tanto privadas como públicas y no lucrativas. Eso ha cambiado a mejor, solo hay que ver la primera edición del Anuario Corresponsables que publicamos a inicios del 2006 donde aparecían menos de 500 organizaciones y la última edición, la número 18, donde aparecen más de 3.000. No obstante, falta mucho por mejorar para lograr la credibilidad y confianza en lo que se dice y se hace en esta materia.
Los acuerdos internacionales por la sostenibilidad y la posición de inversores y financiadores a favor de los criterios ESG han hecho que pasemos de la voluntariedad en menor o mayor medida a la exigencia. ¿Cuál es el nivel de compromiso de la industria española con la RSE?
Cada vez está más comprometida la empresa española con estos temas, pero aún falta mucho para lograr que todas las empresas, también las pymes en general, apuesten de manera seria, transversal e integral por la RSE y la apliquen a su gestión de una manera holística.
¿Qué sectores dentro de este ámbito industrial son los que más han avanzado y los que van más rezagados y a qué responde?
Pues diría que los sectores más tradicionales, como la banca, el asegurador o el energético han liderado en buena medida estos temas, quizá por llegar de manera más directa al ciudadano, mientras otros sectores como el de los propios grandes medios de comunicación siguen muy retrasados, tanto en la manera cómo informan de la RSE, la Sostenibilidad, la Agenda 2030 o los aspectos ESG, como de la forma en que integran todo ello a su gestión y cadena de valor. Creo que hace falta más exigencia por parte de los anunciantes para que todos apliquemos la RSE a nuestra gestión.
En el caso de Corresponsables somos una BCorp desde hace años y disponemos de nuestro Informe de Sostenibilidad con nivel advanced del Pacto Mundial. Si nosotros podemos, con los pocos recursos que tenemos, todos pueden y deben aplicar la RSE a su gestión y día a día.
España es un país de pymes con más del 95% de las empresas perteneciente a esta categoría. ¿La RSE es sólo cosa de grandes compañías? ¿Se ven concernidas las pequeñas empresas?
Cada vez hay más pymes que apuestan por la RSE, como aparece en la sección del Anuario Corresponsables o la propia publicación de pymes que difundimos, pero si es cierto que aún falta que el grueso grande de las pymes y las microempresas integren todos estos temas a su gestión y se den cuenta de que de este modo serán más competitivas y sostenibles en el tiempo.
Metidos en materia de sensibilización, ¿por qué hay que ser socialmente responsable y eso qué beneficio tiene?
Tiene grandes beneficios tanto internos, generando más orgullo de pertenencia y mejorando el clima laboral, como externos en la comunicación, diálogo y relación con todos los grupos de interés.
En Envera nos interesa especialmente el impacto social. Pero las empresas encuentran muchas dificultades para poder medir este esfuerzo, empezando por la ausencia de un consenso general sobre estandarización de criterios. ¿Cree que la monetización puede ser la mejor solución para llegar al corazón de los consejos de administración?
En efecto, como se suele decir, lo que no se mide no se puede mejorar, y aún falta mucho por mejorar también en este ámbito.
Nos hemos vuelto locos con la plantación de árboles… árboles que ni siquiera crecerán. ¿Atisba orden para tanto caos?
La plantación de árboles es una buena medida para compensar las emisiones de CO2. En Corresponsables tenemos nuestro Bosque Corresponsables en el que más de 200 aliados son padrinos y creemos que es buena medida para luchar contra el cambio climático, aunque no la única, por supuesto.
En medio de este río revuelto hay quien ha buscado un atajo para ganar mediante el greenwashing y socialwashing. ¿Cómo distinguir las fake news en este ámbito?
Eso es pan para hoy y hambre para mañana. Antes era más fácil cuando todos estábamos aprendiendo hacer lavado de imagen con estos temas, pero creo que ahora cada vez es más difícil y muy perjudicial, pues hay muchos grupos de interés que están atentos a estas malas prácticas y las denuncian.
Una buena práctica de RSE en España y otra en Iberoamérica, donde cada vez está más presente Corresponsables, que le hayan sorprendido.
Son muchísimas, solo hay que echar un vistazo en www.corresponsables.com a las iniciativas reconocidas en las 13 ediciones de los Premios Corresponsables para darse cuenta. Lo bueno es que en estos temas está permitido y es válido copiar lo que funciona, aunque lo haga tu propio competidor. Hay que entender siempre la RSE como un proceso de mejora continua y tener claro que lo que no se comunica, no existe. Y que si comunicamos lo que hacemos estaremos ayudando a que otras entidades sigan nuestro ejemplo y entre todos construyamos un mundo mucho mejor.
Corresponsables es un observatorio de primera magnitud para conocer tendencias. Cuando hablamos de impacto social, ¿hacia dónde buscan dirigir las compañías sus políticas de responsabilidad?
En estos momentos la mayoría de ellas están enfocadas en cumplir en la medida de sus posibilidades la ambiciosa Agenda 2030 y en integrar los aspectos ESG a su gestión.
¿Cuál debe ser la estrategia de una ONG que quiera avanzar en sus proyectos con este viento a favor de los ESG?
Creo que las ONG, al igual que los medios de comunicación, deben predicar primero con el ejemplo e informar de cómo están aplicando y gestionando su Responsabilidad Social. Eso les ayuda mucho a darse a conocer y que sus potenciales donantes las valoren, las reconozcan y las elijan.