En total, como informaron ambas ministras, se movilizarán 7.300 millones de euros de inversión privada y 210 proyectos industriales innovadores.
El plan pretende modernizar el ecosistema de industria-servicios, mediante la digitalización de la cadena de valor, impulsar la productividad, la competitividad, y mejorar la eficiencia energética; facilitar la creación de empresas, su crecimiento y restructuración, mejorar el clima de negocios, seguir impulsando el aumento de la productividad y transformar y modernizar el sector turístico en España a través de sostenibilidad y la digitalización, aumentando su competitividad y resiliencia.
Asigna 3.782 millones de euros a la Política Industrial 2030 y 4.850 millones de euros al impulso de la pequeña y mediana empresa.
En cuanto a la Política industrial, se destaca la digitalización de sectores estratégicos, la modernización y la sostenibilidad de la Industria, y la modernización del sistema de la gestión y tratamiento de residuos.
En lo tocante al impulso a la pyme, se busca el incremento del tamaño de las empresas, facilitar la creación de empresas, mejorar el clima de negocios y ganar competitividad. Los objetivos pasan por tener un millón de pymes digitalizadas, 6.000 emprendedores formados, 40.000 operaciones refinanciadas de pymes, 200 proyectos tecnológicos en pequeños comercios y 3.000 empresas asistidas para internacionalización.