Pueden ser beneficiarias empresas y autónomos con domicilio social o algún centro de trabajo en Galicia, así como empresas de servicios energéticos. La cuantía de las ayudas es del 35% del coste elegible para grandes empresas, el 45% para las medianas y el 55% para las pequeñas con un máximo de 1 millón de euros por proyecto.
Asimismo, las ayudas pretenden fomentar las inversiones en ahorro y eficiencia energética en las compañías gallegas, reducir los costes energéticos en las facturas, aumentar la eficiencia y dinamizar la economía.
Con respecto a las anteriores convocatorias, se introdujeron novedades, como la valoración del ahorro energético tanto en términos de energía final como primaria; la estructuración de las ayudas según el tamaño de empresas y con la inclusión de infraestructura pública frente a la división anterior por sectores de actividad; así como la incorporación de una línea para aquellas compañías que reduzcan, como mínimo, un 30 % los gases de efecto invernadero.
En estos momentos ya se recibieron una veintena de solicitudes, la mayoría para realizar proyectos en pequeñas y medianas empresas. De adjudicarse todo el presupuesto de esta convocatoria, se podría conseguir una movilización de 30 millones de euros, ahorros económicos de 5 millones al año y una reducción de emisiones equivalente a la plantación de 950.000 euros.