Todas las crisis son oportunidades, asegura Wayne Griffiths, presidente de ANFAC, y en esta “España no sólo puede mantenerse sino también puede beneficiarse” en especial con “las energías renovables”, aunque advierte que “sólo podemos salir ganando si trabajamos juntos, colaborando”.
Para Francisco J. Riberas, presidente de SERNAUTO, este punto es “fundamental porque trabajamos con el mismo objetivo”. Por lo que, a pesar de que “viene la tormenta perfecta”, “hay que ver las ventajas competitivas y tirar hacia delante” con la“colaboración público-privada”.
El futuro de la movilidad “es sostenible”, prevé Griffiths, quien considera que “como industria debemos ser parte de la solución”, ya que “tenemos energía renovable”, por lo que Riberas asegura que “queremos ser lideres en la transición” con el fin de “mantener la industria” para lo que considera necesario disponer de medidas “decisivas y rápidas” puesto que se trata de “competir a nivel global”.
A pesar de que “las exigencias son muchas” considera Lorea Aristizabal, directora de Desarrollo de Negocio de CIE Automotive, es necesario realizar un “diagnóstico de la cadena de suministro” con el fin de “conocer esta disponibilidad” unido a “las oportunidades”. Ya que, según Ricardo Olalla, vicepresidente de Sales Mobility Solutions de Bosch España, se trata de un “cambio demasiado rápido” el cual “es posible, pero no es fácil”, señala y donde “hacer una tecnología atractiva” es importante para “mantener la movilidad”, la cual “no va a ser barata” según Ángel Bautista, director de Relaciones Institucionales de Repsol.
Y donde hay “mucha normativa, mucha regulación”, lo cual “está afectando a los ciudadanos”, “hay poco respeto hacia la transición energética”. Una “transición justa” es lo que reclaman donde se desarrolle la industria ya existente sin “cerrarla antes de abrir otra”, apunta Bautista.
