En este sentido, Espasa ha destacado que el mercado europeo presenta un sinfín de oportunidades, especialmente porque “actualmente la producción de semiconductores está prácticamente ausente en Europa”, con la mayoría de las capacidades concentradas fuera del continente. Por el contrario, ha hecho hincapié en la gran inversión de China en la producción de semiconductores: “China tienen de todo en todos los ámbitos. La apuesta de China en semiconductores es gigantesca. Nos superan por todos lados, en cantidad de dinero, en personas, en velocidad y en todo”.
“Quizás debemos aprender algo de China e invertir más y hacer las cosas de forma más rápida”, ha añadido.
Asimismo, el CEO de Semidynamics ha subrayado que, aunque no contamos con una infraestructura sólida en España ni en el resto de Europa, sí poseemos un gran talento humano. Por eso, Espasa ha considerado fundamental establecer programas académicos enfocados en el diseño de chips para aprovechar este potencial. “Necesitamos un grado de semiconductores. Es importante tener ese talento en diseño de chips. No importa que se tarde tres años en lograrlo porque este es un sector que mira a largo plazo, pero es necesario un grado”.
Además, ha señalado la desglobalización como otra oportunidad significativa para el sector: “Está ocurriendo. Esta desglobalización hace que todas las regiones quieran tener su propia tecnología”.
La soberanía de datos y la soberanía de cómputo también emergen como áreas clave donde se pueden generar oportunidades según ha explicado Espasa. “La soberanía de datos es estar seguro de que tus datos están en una región donde las leyes que a ti te aplican, te las aplican a ti y que no están controladas por unas leyes diferentes y la soberanía de cómputo es que los cómputos que vamos a hacer se hagan en la región en la que yo vivo”.
Espasa también ha mencionado que la falta de competidores en Europa puede ser vista como una ventaja, ya que “no estamos en desventaja respecto a otros países europeos que enfrentan desafíos similares”.
Necesidades del sector de los semiconductores
En cuanto a las necesidades del sector, Espasa lo ha divido en dos fases. La primera fase de “plantar”, que incluye la creación de una ley de subvenciones sin la exigencia de avales. “No tiene sentido que se pida un aval igual a la cantidad de la subvención”.
También ha destacado la necesidad de “actuar con celeridad”, dado que los competidores de Estados Unidos y China están avanzando rápidamente. Además, ha enfatizado que el horizonte no debe limitarse a junio de 2026. “Es fundamental establecer una línea temporal que contemple ayudas más allá de esa fecha y contar con opciones de acciones que realmente beneficien al sector”.
En la segunda fase, denominada “regar”, Espasa ha puesto en valor la necesidad de financiación para Full-Mask Tapeouts y la importancia de las compras precompetitivas, tanto a nivel nacional como europeo, para fortalecer el ecosistema, así como la importancia de tejer todas las alianzas posibles: “Esto nos iría muy bien”.
Por último, ha hecho hincapié en la distinción entre semiconductores y microelectrónica, señalando que, aunque ambas áreas deben recibir apoyo, es esencial entender que cada una tiene sus particularidades y no deben confundirse.