REPORTAJE

La automoción española apuesta por el liderazgo en fabricación de vehículos eléctricos

En el 27º Congreso de la Calidad del Automóvil, Ernesto Antolín, presidente de la compañía Antolín, sitúa a España como el segundo fabricante de vehículos y “por qué no los primeros del vehículo eléctrico”. Así lo ha comunicado en una jornada que ha girado en torno al vehículo sostenible, la digitalización y el talento, en la que industry TALKS ha estado presente como medio oficial del evento.

La automoción se enfrenta a nuevos retos puesto que se encuentra en un entorno de cambio, entre ellos la electrificación, según sitúa Toni Fuentes, periodista y presentador de este 27º Congreso de la Calidad del Automóvil celebrado en Barcelona. Esta nueva situación “nos obliga a cambiar lo que hacemos y cómo lo hacemos”, ya que “en el mundo en el que vivimos nada dura mucho tiempo, porque se valora más la experiencia que la posesión”, según Avelino Brito, director general de la AEC, y, en esta etapa en la que se encuentra la automoción, “ha abierto una nueva capa de calidad”, la cual considera que se basa en “el enamoramiento de los clientes”.

En esta nueva esfera. empresas como Antolín, dedicadas a la fabricación de componentes, focalizan su objetivo en “consolidarnos como unos proveedores sostenibles, innovadores y competitivos”, puesto que “el mercado exige una visión global”, según el presidente de dicha compañía, Ernesto Antolín, potenciando así “los mercados del mundo como Asía, China y América del sur incluyendo México”. En este sentido, Francisco J. Riberas, presidente ejecutivo de Gestamp, empresa del mismo sector, establece que su actividad se basa en ser “un asociado clave” con el fin de satisfacer las necesidades de sus clientes mediante “productos y tecnología que no tienen o en las que no quieren invertir” para “acompañarlos y ponerlas en práctica en estas fábricas donde los clientes quieren”.

Con respecto a la situación del sector, en Gestamp consideran que “estamos en un contexto especial con nuevas tecnologías, vehículos más ecológicos, regulaciones más estricticas y con la inflación”, así como “problemas de suministro y logísticos”. Riberas cree que hay una “necesidad de transformar toda la industria en un momento de incertidumbre”, aunque matiza que “siempre que hay un reto hay oportunidades”, y que estos desafíos del “sector del automóvil también lo han tenido otros sectores”, a lo que Antolín añade que “de los problemas y desafíos vienen las soluciones” y asegura que “va a ser complejo lidiar con el coche eléctrico, pero va a ser una oportunidad”. En este sentido, la competitividad es uno de los desafíos para la industria española, según sitúa Antolín, ya que considera que “para poder ser competitivos” es necesario un “entorno estable”, lo que tendrá como consecuencia “que en España haya más vehículos eléctricos”. A pesar de que “estamos en desarrollo de 100 modelos eléctricos en todo el mundo, el problema es de estructura global” donde “no se sabe si hay infraestructura para alimentar” a estos automóviles. Los problemas de la industria de componentes son “el corto plazo, los volúmenes y la inflación” además de la “industria 4.0 o la lucha del talento”, según señala Riberas.

En cuanto a la transición al vehículo eléctrico “no es discutible, es inevitable”, y las industrias “tienen que sacar partido de la digitalización” para este cambio. Por lo que deben servirse de las nuevas tecnologías para ayudarles a ser “más flexibles, inteligentes y digitales”, según afirma Antolín, y a su vez ofrecer calidad, ya que “es implantable discutir si hay o no calidad”, a lo que Riberas aporta que “la calidad es base para la excelencia que piden los clientes” y, en el ámbito industrial, “hay que asegurar la calidad desde el principio” para lo que es fundamental “tener a las personas formadas en calidad y control de calidad”.

En esta línea de los profesionales, aseguran, la sociedad está cambiando y que “lo que antes valía ya no vale”, por lo que es “necesario una transformación de fondo y de forma”, puesto que Antolín subraya que, bajo su experiencia, “ya no es sólo” la retribución económica, sino crear nuevos departamentos de trabajo como el de electrónica, que motiven formando a los trabajadores, puesto que “hay una excelente cultura y profesionales”, indican desde Gestamp.

Otro elemento que establecen que se han introducido en las fábricas es la gestión de los datos, aunque “en las industrias la información ya estaba, pero no lo podías trabajar”. Ahora, pensando en “velocidad y rápida reacción, son herramientas nuevas que hay que sacarle partido”, puesto que para Riberas “la industria 4.0 es la mejor eficiencia”.

El empleo y el entorno laboral en el sector automoción

Si ya los directivos de las fábricas de componentes situaban al talento como uno de los desafíos del sector, Raúl Sánchez, Country Leader Spain de Eurofirms, exponía algunos resultados de un estudio que han realizado desde esta compañía sobre el empleo y el talento en el automóvil. Para ello, parte de que “se trata de un sector relevante en España, con una contribución del 10% del PIB”; sin embargo, tiene que hacer frente a obstáculos como “la brecha de género”, puesto que informa que “menos del 5% de los puestos son ocupados por mujeres” y esto se ve en las universidades, asegura.

Entre los aspectos “más importantes en la gestión del talento” se encuentran la formación continuada y desarrollo con un 41%, la formación en nuevas tecnologías con un 37%, la fidelización del talento con un porcentaje del 25%, un 23% corresponde a encontrar talento cualificado y, por último, la mejora de la experiencia del empleado un 22%, según ha explicado Sánchez. Por el contrario, cita la compensación y beneficios en un 15%, así como la construcción de nuevos modelos de liderazgo con el mismo porcentaje y las estrategias de diversidad e inclusión en un 14%, como “los aspectos menos importantes en la gestión de dicho talento”.

Entre los perfiles “más demandados”, se encuentran los ingenieros técnicos en un 33% y los comerciales de ventas en un 25%, mientras que un 16% son puestos correspondientes a calidad, producción e I+D, y los porcentajes más bajos del estudio, son referentes a compras y logística con un 6,4% y, marketing y comunicación un 6%. Sánchez ha establecido que, para poder cubrir la demanda de estos perfiles, la automoción tiene que hacer frente a varios retos, el principal es “la adopción de las nuevas tecnologías”, seguido del “futuro de la movilidad y sus implicaciones” y, en menor medida, la “adaptación de conocimientos”.

En el estudio presentado, Sánchez ha hecho hincapié en una de las cuestiones planteadas a los encuestados, la referente a la “posibilidad de cambio al sector automoción” puesto que el mayor porcentaje de respuestas es un 26,2% correspondiente a la opción “probable”. Por lo que en este sentido es importante conocer “lo más valorado a nivel general”, como son las “oportunidades profesionales” con el porcentaje más elevado correspondiente al 43%, seguido de la “evolución, el aprendizaje continuo” en un 42%. Aunque “lo más valorado” en cuanto al “talento IT” es un 41% la flexibilidad laboral, relacionado con el 37% referente al “teletrabajo”, según establece Sánchez. Por lo que, desde Eurofirms consideran que “las medidas para atraer a las nuevas generaciones” son “tener un buen proyecto”, “posicionarse como empresa social y comprometida”, tener una organización “adaptable y bien construida”, así como “orientar a las personas y su bienestar, liderazgo por valores” y, finalmente, continuar con una “cultura empresarial e implicar a cohesionar equipos”, todo ello bajo el compromiso de los trabajadores con el proyecto, bajo el lema ‘People First’.

Uno de los aspectos que influyen en el talento, así como en su retención, es el liderazgo de los departamentos de calidad, otro de los temas tratados en esta jornada. Para José Juan Marquínez, jefe de división de calidad de la fábrica en Vitoria de Mercedes Benz, la persona que ocupe estos puestos debe “tener un sueño a largo plazo”, así como “mantener un alto grado de inquietud para ser un interlocutor válido y generoso en la formación de nuestro equipo”. En este sentido Jessica Ferreira, responsable de la implantación de la oficina de digitalización de calidad de SEAT, establece la necesidad de “impulsar nuevas habilidades”, así como “alinearnos con otras áreas para trabajar todos juntos bajo una misma estrategia”.

Win 3

La colaboración en el sector no debe darse únicamente dentro de cada equipo de trabajo de las distintas empresas, sino también es necesario una “colaboración para abordar desafíos tecnológicos” de unas compañías a otras.

En este congreso, Polyworks Europa, SEAT y Tecnomatrix han presentado el proyecto Win 3 que han realizado conjuntamente, un “caso de cooperación para superar un reto tecnológico”, según informa Cristian García, responsable de Meiterbock & Cubing Center de Calidad SEAT, quien explica que “han desarrollado una plataforma Kapture.IO, sobre calidad 4.0” con el fin de “ser competitivos” puesto que “es estar a la vanguardia de los avances tecnológicos”. Según han explicado, en la fábrica de SEAT les surgía un problema de producción, el cual han trasladado a Polyworks, encargados de obtener datos sobre dicho problema para “indagar y buscar datos que previamente han generado en el proceso productivo”, explica Tania Arellano, Account Manager de Polyworks. Una vez obtenidos estos datos, Xavier Conesa, general manager de Tecnomatrix, explica que “hemos cogido toda esta información que hasta el momento estaba separado, y hemos hecho una plataforma donde volcarla toda”. A través de este sistema, asegura que es capaz de avisar cuando “hay posibles paros de la línea” mejorando la efectividad y reduciendo es costes, indica Conesa, mientras que este uso de la tecnología para SEAT es “permitir controlar mi producto en el proceso productivo”.

En la medición o captación de datos en las plantas, García asegura que “hemos asistido a una carrera tecnológica de vértigo” donde “el volumen de datos y de dónde se adquieren” les ha hecho plantearse qué hacer con esos datos a lo que Arellano añade que “la gestión de los datos debe ser equivalente a la capacidad de crearlos”. Este proyecto llevado a cabo por estas tres compañías supone una manera de avanzar, según García, quien invita a participar en planes similares con el fin de “poder medir en el ciclo productivo con un volumen de datos y con un sistema de datos y tiempo de respuesta óptimo”. En este pensamiento, Win 3 es para Arellano “uno más uno más uno es más que tres”, los tres representantes coinciden en que sus respectivas organizaciones han ganado en sus áreas aplicando el conocimiento a proyectos reales, para lo que García establece que están hechos en base a los “recursos humanos de los equipos”.

Automotive EV-olution. Powered by Quality

Bajo este lema, del 27º Congreso de la Calidad del Automóvil ha tenido lugar una de las mesas de debate donde han abordado las temáticas relacionadas con la electrificación. Uno de los principales temas es el relacionado con la legislación, donde María Luz Villamor, senior manager de Calidad de Proveedores de Mercedes Benz España, establecía que España tenemos “nuestra propia ley que implica que el parque automovilístico no puede entrar a ciertos lugares de España” lo cual supone para ellos “un reto enorme” y les “exige innovar y conseguir que la legislación española sea más favorable para los vehículos eléctricos” lo cual afirma que se hace en países como Alemania. Para Toni Carrera, director general de Gestamp Abrera, en el sector hay “tres líneas de trabajo muy claras” por un lado, cita la descarbonización, aportar valor y las personas, el talento, el cual coincide con Mario Martín, director de fabricación avanzada de Teknia, el cual añade otros ámbitos como el uso eficiente de los recursos y la importancia de los datos.

A pesar de que “tenemos un país con mucha experiencia en la fabricación de coches” y cuenta con “proveedores capaces de aportar y producir”, Javier Muñoz, director de Calidad de Volkswagen Navarra, establece que la problemática del coche eléctrico se sitúa en el software, diferenciando entre el que gestiona el vehículo y el que ve el cliente, donde considera que “está la gran transformación”. Aunque para Alberto de los Ojos, director de la factoría de motores de Valladolid Renault, en el manufacturing 4.0 se debe “dar más valor al producto que hacemos y menos al volumen”, estableciendo que “las fábricas no se quedan atrás, la descarbonización de las plantas es fundamental”.

El representante de Renault insiste en la necesidad de conocer la información de las plantas y trasladarla a unas salas, denominadas “torres de control”, capaces de ver el estado de la producción” con el fin de “tomar decisiones”. Sin embargo, esto no sería posible, según señala, sin los trabajadores de las fábricas de los cuales afirma que “no nos damos cuenta de la capacidad tecnológica e innovadora” que tienen. En este sentido, advierte que “la tecnología no es accesible a la industria” y destaca la necesidad de que estos desarrollos tecnológicos surjan en las mismas fabricas sin “esperar a que alguien venga y nos venda un producto”; de ahí surge la necesidad de tener jóvenes talentos que “traigan nuevas formas de trabajar y nueva cultura” a las empresas.

Ciberseguridad

En línea con esta digitalización y el desarrollo de las nuevas tecnologías, Pedro Romero, responsable de Servicios Digitales de Siemens, afirma que “no hay transformación digital sin seguridad”, un tema también tratado en este congreso, puesto que “adquirir datos en los procesos de producción de mis productos” asegura que “me obliga a conectarme”, por lo que “mi riesgo aumenta”.

La mayoría de estos ataques, según Romero, se producen por factor humano ya que “nosotros mismos nos ponemos en riesgo” y “mis proveedores también me ponen en riesgo”. Además, explica que en la industria manufacturera “es la que más expuesta está a ciberataques porque la protección IT no es lo suficientemente grande”, lo que supone un problema ya que “hay mucho dinero que puedes perder”. Para proteger los procesos, Romero considera que lo más importante es “entender el proceso”. Hay varios retos con los que se encuentran las fábricas en cuanto a ciberseguridad se refiere: la transformación digital, ya que está implica hiperconectividad; el conocimiento, puesto que “debemos entender que tenemos que trabajar ciberseguros”; y la ciberdelincuencia.

En cuanto a la relación planteada entre IT y OT, “han estado siempre separados”, según apunta José Mª Moreno, CEO de SCC Consulting, y advierte que “cada vez están más juntos” asegurando que en un futuro “será lo mismo”, por lo que redunda en la importancia de que haya “más perfiles o más OT que sepan de IT”, ya que los dos mundos se tienen que unir de manera más natural, asegura.

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