Brustenga ha subrayado que el concepto de soberanía estratégica que acompaña a la nueva Ley de Industria, en tramitación parlamentaria, es “un tema de seguridad nacional”. La ley es una señal al mercado, ha indicado. “Crecemos más que el entorno europeo y es el momento para recuperar los gaps de competitividad”.
Somos una comunidad y caminamos juntos, aunque a veces no funcione, ha admitido.
Por parte de la Generalitat de Cataluña, ha estado presente Pol Gilbert, secretario general del Departamento de Empresa y Trabajo. Gilbert ha señalado que la reflexión y el debate sobre la industria es un debate europeo. “La industria no es solo motor, sino también un pilar clave”. El alto cargo catalán ha enfatizado que son vitales las colaboración público-privada, la innovación y la sostenibilidad (más verde y más digital).
Tras destacar la reindustrialización exitosa de la Zona Franca, Gilbert ha empleado la siguiente cita: “La mejor forma de predecir el futuro, es construirlo”.
Antes de Gilbert y de Brustenga, ha intervenido Jordi Valls, cuarto teniente alcalde del Ayuntamiento de Barcelona y responsable del área de Economía. Valls es un veterano absoluto, pues fue consejero de Industria en el Gobierno autonómico de Pasqual Maragall.
Valls ha declarado que estamos en un ciclo político de incertidumbre y aludiendo a los informes europeos de Letta y Draghi ha insistido en la necesidad de un mercado energético, financiero y tecnológico único en Europa.
En este sentido, ha añadido, el problema de la industria se resumen en una serie de letras D:
- Demografía
- Desglobalización
- Descarbonización
- Desigualdad
- Democracia (su defensa)
- Deuda (y su volumen)
- Digitalización
- Defensa
En el arranque de la ceremonia de inauguración, la presidenta de la Asociación Española de la Calidad (AEC), Beatriz López Gil, ha compartido que en el Congreso van a participar más de 80 expertos de altos valor que hablarán de sostenibilidad, reindustrialización, innovación, talento o ciberseguridad gracias a la colaboración de CERSA, ENISA, EOI, OEPM y Sepides.
“La industria es un motor indispensable para la economía. Ofrece estabilidad y cohesión territorial, aporta innovación y formación”, ha dicho López Gil.