Descríbanos una fábrica inteligente…
Nosotros tenemos una visión de un tipo de empresa que sea totalmente digitalizada. Por nuestro conocimiento de la industria, sigue existiendo mucho trabajo con papel, gestión de flujos de trabajo, procedimientos y tareas que se abordan dentro de la fábrica… y al final es un grave problema ya que dependes del papel y no tienes información en tiempo real de lo que está sucediendo, con lo que te incapacita para tomar decisiones correctas a tiempo.
Para la industria digital la propia empresa debe tener una cultura digital, que es uno de los grandes escollos con los que nos encontramos ahora mismo. La empresa digital cuenta con procesos digitales que gestionan toda la organización. Muchos de los puestos de trabajo cambian a otro tipo de formato. Por ejemplo, antiguamente en contabilidad teníamos libros contables y ahora tenemos ERPs, lo que nos ha permitido gestiona automáticamente la contabilidad y tener la información accesible. Tenemos que conseguir que la información fluya digitalmente a través de todos los procesos de la compañía.
Y eso se consigue a través de aplicaciones software, implantación de robots y máquinas inteligentes, esto es, conectadas que puedan gestionar sus flujos de trabajo y de información. Y, sobre todo, es un tema mental, la capacitación de las personas, porque la tecnología existe y además no es cara, es accesible económicamente por cualquier tipo de empresa. Es más, en los proyectos de digitalización e innovación estamos viendo que se implantan más rápido en pymes que en grandes multinacionales, porque su forma de moverse y capacidad de cambio es más rápida.
En definitiva, una fábrica inteligente es aquella en la que las personas aportan valor y los procesos están digitalizados, trabajan autónomamente.
Entiendo por lo que comenta que los principales retos se basan en el cambio de mentalidad, más que en la inversión…
Todos los empresarios tienen miedo de invertir en algo que no conocen bien, pero la rentabilidad está más que demostrada ya hace muchos años. La robotización tiene un ROI muy rápido, en muy poco tiempo se rentabiliza. Los procesos repetitivos que no aportan valor se estén realizando por robots. Produces con más calidad, los trabajadores tienen otro tipo de funciones, que aportan más valor al negocio, concienciados en la mejora continua y la rentabilidad de la empresa.
Los recursos humanos deben dar valor a la organización, crear nuevos productos, nuevos servicios, mejorar los procesos.
¿Cómo acompañan en Kaytek a las empresas industriales, y principalmente pymes, en el proceso de la transformación digital?
Conjuntamente con el cliente plantemos un proceso de digitalización por fases. Habitualmente nos encontramos que nuestros clientes no conocen hasta donde la tecnología puede ayudarles. Habitualmente empezamos los proyectos con una prueba de concepto en una zona de la organización, con la que coger la experiencia y conocimientos para aplicar estas técnicas y tecnologías al resto de la organización.
Nosotros presentamos servicio de digitalización a través de nuestra solución tecnológica Kaytek Platform. Acompañamos al cliente, inicialmente en la implantación y posteriormente con actualizaciones de nuevas funcionalidades y procesos. Nuestro modelo de negocio es un servicio que se contrata anualmente, sin coste de adquisición de software ni hardware.
Aseguran retornos a corto plazo, ¿qué estadísticas y cifras manejas en función de la experiencia de sus clientes?
Tenemos de todo tipo, pero influye mucho el grado de madurez de la implantación y de la digitalización de la organización. Hay empresas que han aumentado la producción de sus máquinas (OEE) en un 20%, otras que han disminuido sus no conformidades en un 15% o más. También hay que manejar los conceptos como coste operario, formativos… Estamos hablando de datos en tiempo real, sin documentación por medio.
Igualmente, obtenemos mejoras en la atención a sus clientes con mayor información. En tiempo real conocemos el estado de la producción y si se va a entregar el pedido en tiempo y calidad exigida.
¿En qué estado se encuentran las pymes y grandes empresas industriales en digitalización, con respecto a países de nuestro entorno?
No puedo hacer la comparativa con otros países porque lo desconozco en detalle. Pero de las posibilidades que tienen las empresas en relación con la digitalización, están a un 10%. No hablo versus la competencia, sino la potencialidad que tienen. Hay empresas donde las instrucciones de trabajo siguen estando escritas en la pared, ni siquiera en papel, y estamos hablando de líderes en su sector a nivel mundial.
¿Consideras que ahora sí hay mentalidad de cambio?
Hay mentalidad de cambio, pero no hay rapidez por acometerlo. Las empresas hemos pasado un golpe muy fuerte con la pandemia. Se han implantado tecnologías en el sector industrial donde en otros sectores se llevan utilizando desde más de una década, como el acceso remoto a las máquinas o videoconferencias, se han vendido como proyectos estrella, pero son tecnologías de hace 15 ó 20 años.
Las empresas saben que tienen que llegar a ese punto, pero no vemos que se le dé la importancia suficiente, que sea algo en la que se muestre conciencia de que si no hago esto posiblemente dentro de un tiempo muy cercano voy a tener un problema grave.
¿Son las Administraciones las que tienen que implicarse más en esta concienciación?
Considero que las instituciones, al menos en el área donde operamos (País Vasco), están realizando un gran esfuerzo en concienciar, formar y ayudar a través de subvenciones a la industria en este camino. Tienen una visión clara de futuro y lo están transmitiendo.
Estamos en un momento ideal y no sólo por los fondos de Europa. Estamos pasando una crisis, los costes son superiores de logística y hay que volver a producir localmente. Tenemos que estar abiertos a la realización de continuos cambios.
Estamos viendo en empresas que se está contratando un perfil muy concreto y es el de responsable en digitalización. Este perfil es muy necesario, tienen que tener conocimientos industriales como tecnológicos, e incluso visión de negocio. El problema es que este tipo de perfil escasea en el mercado, es muy difícil de encontrar.
No tenemos profesionales, ¿qué se puede hacer?
Por ejemplo, en el negocio de las tecnologías de la información tenemos un problema muy grave y es que escasean los trabajadores cualificados. De los centros formativos salen personas con unos conocimientos básicos, situación normal porque la tecnología cambia muy rápidamente. Se requiere formar durante largos periodos de tiempo en la propia empresa en las últimas tecnologías. En la industria es un caso más complejo, cada empresa es un mundo y son tecnologías distintas, aún siendo del mismo sector los procesos de fabricación son distintos, es muy complejo.
En el proceso de digitalización recomiendo a la industria que haga una profunda prospección en el mercado TIC y que vea diversas soluciones, consulte a varios expertos y acuda a ferias y eventos de innovación. No existe una única solución capaz de digitalizar todos los procesos de una industria, para Kaytek una de las claves del éxito de los proyectos es la integración de los diversos sistemas que tiene la empresa, trabajando en común para una correcta digitalización.
¿Es el sector aeroespacial el más avanzado en relación a la transformación digital? ¿Qué diferencia existe con otros sectores en relación a la digitalización de procesos?
Para nosotros no hay ningún referente, tenemos empresas del sector Metalúrgico, manufactureras, aeronáutica, automoción… La cantidad de mejora que existe es en todas las empresas de forma parecida. En el sector industrial no considero que exista un sector más avanzado que otro, lo que si sabemos es que dentro del mismo sector hay empresas que han apostado por este camino y están muy avanzadas, recogiendo ahora los beneficios de esa apuesta.
A la hora de medir resultados, ¿qué posibilidades ofrece el Big Data y otras tecnologías en la empresa industrial?
La tecnología es clave en este proceso de digitalización. Kaytek utiliza tecnología Big Data, IoT, Blockchain e Inteligencia Artificial lo que nos permite digitalizar los procesos y recoger la información en tiempo real. En nuestro caso, nuestro servicio es como “Un Cerebro” que gestiona automáticamente y sin intervención humana todas las operaciones de la planta en tiempo real. Máquinas, personas, materia prima, utillaje o herramientas son gestionados para el correcto funcionamiento.
El Big Data nos permite recopilar toda la información y gestionarla en tiempo real; con la IoT hablamos con la máquina, no sólo nos permite recoger datos, sino que podemos enviar órdenes o configuraciones.
En relación al Blockchain, permite tener la trazabilidad completa de cada uno de los activos y del proceso productivo, también asegura la información y que el día de mañana pueda ser compartida con otras empresas, por ejemplo, la cadena de suministros.
Dentro de unos años, la tecnología Blockchain va desempeñar un papel fundamental, sobre todo en certificación. Las auditorías examinan ciertos procesos de la empresa y buscan evidencias de su buen funcionamiento. Con Blockchain somos capaces de ejecutar el proceso según se ha definido (cumpliendo la normativa) y la empresa tiene toda la información para realizar automáticamente la auditoría. No sólo audita un proceso de cada 1.000, el sistema garantiza que todas las piezas fabricadas han seguido el proceso de producción y que cumplen la normativa establecida.