¿Qué peso tiene en Andalucía en el sector aeroespacial y cuál es su posición con el resto de España?
El peso industrial de nuestro sector es muy importante en Andalucía, estamos entre los 3-4 sectores estratégicos para la región. En los últimos datos que hemos recogido representamos un 9,19% del PIB industrial andaluz y algo más de 1,2% del PIB global, lo cual muestra un peso muy importante. A nivel nacional, Andalucía también tiene mucho que decir en el sector aeroespacial y siempre decimos que estamos entre los polos aeronáuticos más relevantes de Europa, podemos estar hablando del top 5, del top 7, junto a otras grandes regiones como Hamburgo en Alemania, Toulouse en Francia, la relevancia en este sector es grande y también la experiencia y la larga tradición, son más de 100 años en el sector aeroespacial en nuestro territorio.
¿En qué nuevos desarrollos se está trabajando en el sector en esta región?
Si me tuviera que limitar a dos grandes retos, por un lado, sería la internacionalización en el sentido de que nuestras empresas empiecen a abordar otros mercados internacionales, globales, más allá de sus mercados habituales muy focalizados en el mundo de Airbus gracias a que tenemos una planta muy importante en Andalucía. El otro segundo reto sería el de la diversificación, en evolucionar desde la aeronáutica tradicional a otros sectores emergentes y donde las capacidades de nuestras empresas claramente pueden dar respuesta a los retos que hoy en día tenemos en el mundo del espacio, por ejemplo. Son nuevos negocios donde nuestras empresas están poniendo el foco también de cara a ampliar y diversificar su actividad.
¿Es un sector exportador?
Sin duda. El mercado aeroespacial ha dejado de ser un mercado local, doméstico, pensado en Europa, pasado a otros mercados como el americano, o como el asiático, que a la vez genera más oportunidades para nuestras empresas. Esto se está demostrando en los últimos años donde estamos viendo un incremento importante de los niveles de exportación, cada vez exportan más empresas. Los últimos datos que disponemos es que 71 empresas andaluzas ya están exportando y también el fuerte incremento que hemos tenido este último año con un 39% más de cifra total de exportación respecto al año precedente, lo que indica que son objetivos de internacionalización que paso a paso se van cumpliendo.
¿Qué empleos directos e indirectos general la industria aeroespacial en Andalucía?
Actualmente superamos los 13.000 empleos directos. Hay que recordar que venidos de dos años de pandemia donde evidentemente el empleo también se vio disminuido. Creemos que vamos a seguir creciendo en 2023 según la tendencia y la carga de trabajo que van recibiendo nuestras empresas. Es un empleo muy cualificado, estable, donde la formación es muy intensa y se hace una inversión muy importante en cada uno de los trabajadores, no hablamos solo de los titulados, también es clave la cualificación de los mandos intermedios.
La formación profesional es clave ahora mismo para desarrollar el sector y va a ser muy necesario la incorporación de nuevos profesionales al sector para responder a los retos y a la carga de trabajo y a los nuevos contratos que ya se están firmando.
¿Qué tipo de talentos se requerirán en el futuro?
Esa cualificación va muy referida a una preparación técnica muy fuerte, a estar muy al día en las nuevas tecnologías. Estamos hablando de fabricación aditiva, inteligencia artificial, hablamos de un mundo que va cambiando muy rápido, en nuestro sector especialmente el cual evoluciona hacia el camino de la digitalización absoluta de nuestras plantas industriales. Por otro lado, si estamos hablando de internacionalización, esos perfiles van a requerir también los idiomas, otro de los retos muy importantes para poder manejarse en esos mercados internacionales.
¿Cuáles son las líneas de desarrollo en relación a la sostenibilidad en el sector aeroespacial?
Es otro objetivo primordial, no para este año ni el siguiente, ya para las próximas décadas. Estamos en el camino de la descarbonización donde el objetivo es volar con emisiones cero y las inversiones que están haciendo las empresas son muy cuantiosas. De hecho, los grandes proyectos del sector van dirigidos en torno a este objetivo de la sostenibilidad.
¿Cómo se está trabajando en materia de ciberseguridad en las empresas aeroespaciales?
Nos preocupa mucho evidentemente de hecho, entre nuestras empresas hemos tenido varios casos de ataque cibernético y las empresas han entendido que tienen que protegerse ante esa amenaza. Está costando más llegar a esa protección de ciberseguridad en la pequeña y mediana empresa, pero en general hay una concienciación muy importante y cada vez se están implantando sistemas más amplios y rigurosos de cara a salvaguardar la seguridad de los sistemas y de la información de las empresas.
¿Cuáles son los principales retos industriales y económicos que tiene el sector?
En el aspecto económico el reto es volver a los niveles prepandemia, en ese sentido creo que estamos acelerando plazos. Las estimaciones que se hicieron en el momento más duro de la pandemia era que podíamos estar hablando de 5, 6 o 7 años para una plena recuperación, y empezamos a ser cada vez más optimistas dado que los crecimientos que estamos teniendo ya lo hemos tenido en el 2022 y pensamos que va a ser aún más en el 2023, quizá volvamos a niveles de facturación que manejábamos en el 2019 para finales del 2023, estamos trabajando para ello.
A nivel industrial los retos fundamentales son, evidentemente, la digitalización es un punto clave y primordial. Las empresas son conscientes de que si no invierten en modernizar sus plantas de producción va a pasar un tren en el que luego no van a poder montarse. Con lo cual es un reto fundamental, en un sector que evoluciona muy rápido y las empresas tienen que adaptarse a esos cambios al mismo ritmo que se producen.
