José Ignacio Domínguez, responsable de Desarrollo de Negocio en el área de Energía de la Fundación CIDAUT, ha recalcado que “nos encontramos en un momento clave para transformar el hidrógeno de una promesa a una realidad industrial”.
En el análisis de los desafíos, ha señalado que “uno de los grandes retos sigue siendo el coste de producción del hidrógeno”, explicando que desde su institución trabajan en la mejora de electrolizadores y en nuevas alternativas de electrólisis, como la de óxidos sólidos (SOE), con vistas a una mayor eficiencia. Además, ha remarcado la importancia del uso del hidrógeno en movilidad terrestre, aérea y marítima, mencionando que “incluso en sectores como el ferroviario o la aviación ligera, ya se están dando pasos con tecnologías basadas en hidrógeno”.
Otro aspecto clave ha sido la distribución y almacenamiento del hidrógeno. Marta Castro Pérez-Chirinos, director of Regulation at Asociación de Empresas de Energía Eléctrica en AELEC ha destacado que “la clave está en acoplar la producción con el consumo, algo vital para lograr una gestión energética eficiente y resiliente”. Ha puesto como ejemplo los sistemas de almacenamiento subterráneo artificial como una de las soluciones a explorar, dada la baja densidad del hidrógeno.
Asimismo, Emilio De Barrio, Iberia Supply Chain Manager Air Liquide, ha insistido en la relevancia de la seguridad, declarando que “el hidrógeno es seguro; se invierte tanto en I+D como en sistemas que garanticen procesos, transporte y almacenamiento seguros”. También ha llamado a desmitificar ciertos miedos: “La gente aún pregunta si el hidrógeno explota, y debemos responder con pedagogía y rigor técnico”.
Finalmente, Jesús Manuel Gil, director de Hidrógeno de ENAGAS ha concluido con un llamado a la acción: “No vamos a conseguir nada de forma aislada. Es momento de colaborar más, entre centros tecnológicos, empresas y administraciones. Si no lo hacemos ahora, perderemos una oportunidad país”.