¿Qué retos tienen por delante los clústeres españoles?
Los clústeres españoles ya han demostrado su potencial, han sacado músculo en sus dos décadas de vida: en la actualidad cuentan con 12.200 empresas y unos 4,4 millones de trabajadores (casi el 25% de los empleados del país), además de que la facturación de sus compañías supera el 40% del PIB y apunta hacia el 50%. Se han convertido, por méritos propios, en la gran palanca de la innovación en la pyme española. Ahora, su principal reto se centra en asentarse como un actor fundamental en la reindustrialización. Estas potencialidades tienen que hacerse notar en el escenario industrial, porque los clústeres tienen un punto de vista singular y muy beneficioso. En la pandemia, cuando la cadena de suministros empezó a flaquear, la industria encontró respuestas ágiles en los clústeres porque tenían alineadas y abiertas las líneas de colaboración con las pymes españolas. En el plano más interno, los clústeres tienen ante sí cimentar un modelo de negocio estable, lograr la consolidación de los equipos de gestión de fondos europeos que han generado con la llegada de fondos europeos o impulsar la atracción de talento.
¿Qué importancia tienen los clústeres españoles para abordar los grandes desafíos a los que se enfrenta la industria española?
Los desafíos de los clústeres están íntimamente relacionados los objetivos de la Unión Europea y giran en torno a la transición verde y el impulso de la digitalización. Tenemos ante nosotros diferentes retos como la necesidad de la descarbonización de productos y procesos, la captación de inversiones o el avance en la competitividad. Esa competitividad debemos abordarla por la vía de la innovación y la colaboración, dos de las señas de identidad de los clústeres para liderar los principales indicadores industriales y la digitalización. En definitiva, todo pasa por la excelencia industrial.
¿Cómo afecta la irrupción de las distintas aplicaciones de Inteligencia Artificial?
Todas las nuevas aplicaciones que están surgiendo a raíz de la eclosión de la inteligencia artificial son muy positivas y pueden ayudarnos mucho en la gestión de los procesos y muchos otros ámbitos. Sin embargo, la verdadera diferenciación desde el punto de vista de los clústeres radica en el talento: en generación, atracción y retención de la calidad en el empleo. En el desarrollo de las ciudades, por ejemplo, hemos pasado de la lucha por dotar de métricas y datos al territorio a través de la digitalización a la lucha por la adquisición de habilidades, a la lucha por el talento.
Usted es director general de Smart City Clúster, ¿qué rol desempeña esta organización en la transformación de las ciudades y, concretamente, en la presencia de la nueva industria en estas ciudades?
Smart City Cluster es una organización sin ánimo de lucro que agrupa más de 200 empresas de ámbito nacional y que trabaja en el desarrollo de ciudades. El clúster se ha configurado para ayudar a los territorios a descubrir, impulsar y proyectar sus cualidades más competitivas y atractivas, precisamente para que sean capaces de generar, retener y atraer el talento y, en definitiva, mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Nuestra experiencia es que un clúster se erige como el mejor escenario público-privado para la colaboración: para llegar más lejos y mejor armados. Allí se comparte el ‘know-how’ para enriquecerse mutuamente y se combina la flexibilidad y versatilidad de las pymes con la potencia de las grandes empresas. En definitiva, compartir aprendizajes para crecer mejor y poder competir con mayores garantías. Este año cumplimos 10 años y en esta década se ha consolidado un modelo que ha fortalecido a las pymes, ha creado empleo de calidad y ha generado soluciones para las demandas de unos mercados cada vez más exigentes y globales.
¿Cómo evalúan las ayudas del Ministerio de Industria a los clústeres?
En los últimos tres años, el Ministerio de Industria ha multiplicado el programa de apoyo a los clústeres por cinco. Ésta es una realidad clara a que los clústeres han respondido con mucha solvencia: están desarrollando proyectos que fijan empleo de calidad y responden a las demandas del mercado, tienen un nivel de ejecución de los fondos por encima del 90%, han presentado propuestas por más el doble de la financiación disponible y, además, han creado un corpus de personal especializado en la gestión de fondos europeos. Sin duda, esas ayudas se han convertido en un aliado esencial para el desarrollo de la innovación en las pequeñas y medianas empresas. Técnicamente, es una norma muy bien elaborada porque alinea de una forma óptima los incentivos a cada uno de los agentes involucrados.
¿Cómo se puede fomentar desde sus organizaciones la innovación en las pymes industriales?
Precisamente a través de la gestación y desarrollo de estos proyectos de innovación que ya tienen en su ADN las pymes y que responden a demandas de los distintos sectores. Las cifras hablan por sí solas: desde 2007 dentro del Programa de Apoyo a las Agrupaciones Empresariales Innovadoras se han puesto en marcha más de 2.500 proyectos por un valor de 220 millones de euros. Los clústeres se han convertido en la única puerta de entrada de la innovación para una gran cantidad de pymes y, por tanto, en un elemento imprescindible para su desarrollo. En la práctica cubren la distancia que separa a las empresas de esos proyectos: solas no podrían acudir y necesitan entrar en entornos de cooperación.
En este momento de transformación ¿cómo se están adaptando las empresas de fabricación para encontrar nuevo talento?
Están trabajando en varias claves: definiendo nuevas ofertas formativas, impulsando las vocaciones en edades tempranas o identificando nuevas competencias técnicas y personales para actualizar perfiles profesionales y definir nuevos. Múltiples clústeres están precisamente desarrollando ofertas formativas concretas en el ámbito de la FP y los grados duales o en los trabajos finales de grado universitarios. Y, en muchos casos, con el añadido de atraer el talento femenino a la industria. En general, es necesario trabajar en la búsqueda coordinada de soluciones, contando con el compromiso de todos los agentes y administraciones para la definición de estrategias de retención del talento local y la atracción de talento del exterior.