Se trata de incentivos «para apoyar a nuestro tejido industrial y minero en la mejora de su productividad, a ser más competitivo y superar con solvencia los importantes retos a los que se enfrenta relacionados con la descarbonización y la transición energética», ha indicado el consejero, que ha incidido en que la industria es «un pilar estratégico para el crecimiento por su capacidad de crear empleo estable y de calidad, atraer inversiones y promover la innovación tecnológica».
En concreto, las partidas se dividen en varios programas. Uno de estos instrumentos, denominado Incentivos Integrados, INCEA, está conformado por 250 millones de euros con los que se estima la movilización de 1.000 millones en inversión industrial. «El objetivo que persigue es mejorar la competitividad de las pymes industriales y mineras andaluzas desde una doble perspectiva: respaldar la ampliación y diversificación de sus capacidades y ayudarlas a acometer actuaciones de mejora energética, a través del uso de renovables y otras medidas de eficiencia». Se divide en cuatro programas: las cadenas de valor de 19 sectores industriales englobados bajo el Plan CRECE Industria, el hidrógeno verde, la minería sostenible y los espacios productivos.
Otra herramienta relevante para respaldar grandes proyectos industriales se recoge en el programa de Incentivos Complementarios a los Incentivos Económicos Regionales (IER) destinado a proyectos tractores, y dotado con 150 millones de euros. Con estos recursos, financiados con fondos propios de la Junta de Andalucía, se calcula que se pueden captar 2.000 millones en grandes inversiones industriales estratégicas. «Este es un programa de ayudas diferencial que tiene la finalidad de atraer inversión industrial a nuestra región, y que incrementa adicionalmente las ayudas a proyectos tractores». La ventanilla de solicitud para la convocatoria 2025-2026 ya se encuentra abierta y pueden acceder a ellas grandes compañías del sector aeroespacial, de la industria manufacturera o la logística avanzada.
Además, el consejero ha recordado que el volumen de las ayudas junto a las dos convocatorias anteriores eleva el volumen de apoyo a grandes proyectos industriales hasta los 300 millones de euros. El consejero ha señalado que se han respaldado ya con 40 millones la inversión de 14 proyectos por un montante global cercano a los 800 millones.
El siguiente paquete de apoyo industrial asciende a 157 millones de euros procedentes de un nuevo instrumento europeo, el Fondo de Transición Justa con los que fomentar la reindustrialización sostenible de las provincias de Almería, Cádiz y Córdoba, y compensar el coste socioeconómico que está suponiendo para esos territorios los cierres de sus centrales térmicas de carbón. Son ayudas para 10 proyectos tractores en sectores estratégicos como el naval, aeroespacial, hidrógeno verde o logística avanzada, «aprovechando el potencial y las fortalezas de cada una de estas provincias». Las convocatorias de incentivos están ya publicadas en su práctica totalidad y está abierta la ventanilla para la solicitud de seis de estos proyectos.
Paradela ha informado de que este año, y enmarcada en la Estrategia Aeroespacial, «lanzamos la primera convocatoria para apoyar la participación de la industria en el desarrollo de sistemas satelitales cien por cien andaluces«. Con un presupuesto de 16 millones, cofinanciados con Fondos FEDER, tiene por objeto impulsar misiones satelitales que se desarrollen íntegramente en Andalucía, incluyendo la gestión, diseño, fabricación, lanzamiento y operación en órbita del satélite. Al hilo de ello, el consejero ha avanzado que, conscientes de las extraordinarias perspectivas industriales que ofrece el sector aeronáutico y de defensa, la Consejería proyecta una nueva línea de ayudas por valor de 15 millones de euros para apoyar la fabricación de drones andaluces.
A todo ello se suman los 160 millones para el uso eficiente de la energía tanto para ciudadanos como para empresas y entidades locales. Con estas ayudas, cofinanciadas a través del programa FEDER 21-27, ha explicado el consejero, quien ha abundado en que estas ayudas se estructuran en cuatro líneas: una dirigida al sector residencial y edificios e instalaciones públicas locales (93 millones), otra para el sector empresarial y cadena agroalimentaria (44,6 millones), para la digitalización de redes y puntos de recarga (12,7 millones) y para hogares vulnerables (10 millones).
