Este nuevo programa, denominado “Cadenas de valor industrial”, se enmarca en la orden de Incentivos Integrados de competitividad y energía en Andalucía (INCEA), un nuevo instrumento con el que la Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Industria, Energía y Minas, pretende movilizar 1.000 millones de euros de inversión y generar 2.100 empleos. Se trata de la primera convocatoria de ayudas que reúne de forma conjunta incentivos para inversiones productivas y para la mejora energética de la industria.
En concreto, pueden solicitar las ayudas de este nuevo programa microempresas, pequeñas, medianas y grandes empresas de los sectores industriales que cuentan con uno de los 19 planes de cadena de valor CRECE Industria: la industria química; metalúrgica; de la madera y el mueble; farmacéutica; del textil, cuero y calzado; cementera; de la salud; del papel, cartón y artes gráficas; vidrio; joyería; agua; plástico sostenible; digitalización; automoción; metalmecánica; energía, frío y climatización; la industria para la edificación; el sector naval, y la piedra y mármol; junto a aquellas actividades encuadradas en la Estrategia Aeroespacial de Andalucía.
Los incentivos que se convocan cuentan con dos líneas complementarias enfocadas a que las industrias puedan hacer crecer sus cadenas de valor a través de la realización en paralelo de inversiones productivas y de mejora energética.
Línea 1: ayudas al desarrollo competitivo
Los incentivos de la primera línea de ayudas, dirigida al desarrollo competitivo de las cadenas de valor industrial y gestionada por la Secretaría General de Industria y Minas, se tramitarán bajo el régimen de concurrencia competitiva, permitiendo así la selección de los proyectos con mejor impacto económico y social. Se podrán presentar solicitudes a esta convocatoria hasta el próximo del 31 de octubre.
Bajo el amparo de esta línea se ponen a disposición de la industria andaluza un total de 25,3 millones de euros en incentivos para la adquisición de activos materiales e inmateriales para la puesta en marcha de un nuevo establecimiento, la ampliación de la capacidad ya existente, la diversificación de la producción o la transformación del proceso de producción.
También se financia el desarrollo industrial y la apuesta por nuevos productos o procesos, apoyando actuaciones de investigación industrial y desarrollo experimental, así como la innovación en materia de procesos y organización. Además, se pretenden reforzar las capacidades y la especialización de las pymes y autónomos del ámbito industrial con la puesta a su disposición de ayudas para la contratación de servicios de consultoría.
En función de la tipología de actuación y beneficiario, los porcentajes de ayudas a la inversión para el desarrollo competitivo de la industria oscilan entre un 15% hasta un máximo del 80% (alcanzando el 100% para aquellas actuaciones que incorporen innovación en productos y procesos de pymes), siendo el incentivo medio entre el 50 y el 60%.
Los proyectos de inversiones productivas en nuevas o pymes existentes respaldados por la Línea 1 se deben complementar con una apuesta por la mejora energética a través de proyectos solicitados por la Línea 2.
Línea 2: ayudas al uso eficiente de la energía
La segunda línea de ayudas, enfocada al uso eficiente de la energía y dotada con 83,6 millones de euros de fondos FEDER, será tramitada por la Agencia Andaluza de la Energía bajo el régimen de concurrencia no competitiva, y permanecerá abierta hasta el 30 de septiembre de 2027 o hasta el agotamiento de los fondos.
En ella se contemplan ayudas para actuaciones que incrementen la eficiencia energética de edificios de uso industrial como la mejora de la envolvente térmica o la adquisición de equipos nuevos para las instalaciones de climatización, agua caliente sanitaria o iluminación.
También se recogen incentivos para mejorar la eficiencia energética en los procesos o instalaciones industriales tales como la renovación de los equipos y las tecnologías por otras de mayor eficiencia energética, la mejora en el diseño de los procesos o la implantación de sistemas de gestión energética mediante TIC.
Asimismo, son objeto de esta línea de ayudas las actuaciones que conlleven un incremento del uso de energías renovables en edificios, procesos e instalaciones de las industrias como la incorporación de instalaciones y equipos nuevos de energía solar térmica, biomasa, biolíquidos, biogás, biometano y otros gases renovables, así como instalaciones de autoconsumo eléctrico, fotovoltaico, con o sin almacenamiento.
Por último, se incentivan las llamadas tecnologías renovables próximas al mercado, para lo que se financiarán equipos consumidores de energía térmica o autoconsumo eléctrico con tecnología eólica, hidrotermia, marina, geotermia, aerotermia u otras tecnologías que no cuenten con una alta implantación en el mercado industrial andaluz, así como actuaciones de transformación de la biomasa para la producción de biocombustibles, biogás, biometano o gases renovables.
Para el caso de las actuaciones relacionadas con el uso eficiente de la energía, los porcentajes de ayudas a la inversión oscilan desde un 30% a un 65%, en función de la tipología de actuación y beneficiario, situándose el incentivo medio entre un 35% y un 45%.
Para facilitar el acceso a las ayudas, la presentación de solicitudes a cualquiera de estas dos líneas, independientemente del organismo que se encargue de su tramitación, se realizará a través de una dirección electrónica única ubicada en la página web de la Consejería de Industria, Energía y Minas.