Esas son las cifras ofrecidas por AFM, la Asociación Española de Fabricantes de Máquinas-herramienta, Accesorios, Componentes y Herramientas, poco antes de celebrar su Asamblea General prevista para el 14 de mayo y que continuará con una jornada titulada Día de la Fabricación Avanzada y Digital.
Los principales competidores europeos de España dan cuenta de incrementos notables en su captación de pedidos: Italia anunció recientemente un crecimiento en la captación en el primer trimestre de 2021 de un 48,6% y Alemania confía en que el ritmo de captación desde China (que el último cuatrimestre de 2020 creció un 17%) marque una buena entrada en los próximos meses. Los paneles de prospectiva de AFM apuntan a una previsión de fuerte crecimiento de la captación de pedidos cercana al 25% en el conjunto de 2021.
El fuerte crecimiento de la demanda en el mercado chino y las expectativas generadas por el plan de impulso de la economía norteamericana de Joe Biden, apuntan a una recuperación potente de la economía mundial que deberá ir acompañada también de mayor dinamismo en Europa, traccionado por la aceleración de los procesos de vacunación y la disposición de los fondos de recuperación.
Así, si el segundo trimestre continúa con la buena captación de los últimos 6 meses, las expectativas de crecimiento de la facturación para 2021 se colocarían en torno a un 12-15%, aproximándonos a los niveles alcanzados en 2019.
Respecto a los sectores usuarios, si bien el sector del automóvil recuperó enérgicamente niveles de actividad tras la parada forzosa al inicio de la pandemia, la transición hacia motorizaciones eléctricas e híbridas, por un lado, y los cambios relacionados con el modelo de movilidad, por otro, dificultan la predicción de la demanda de vehículos, lo que ralentiza las nuevas inversiones.
El sector aeronáutico, por su parte, acusa el impacto del descenso de la movilidad y, salvo en el área de defensa, las previsiones no son buenas para los próximos 2-3 años. El sector ferroviario, por el contrario, atraviesa un buen momento, mientras que el sector energético, con realidades desiguales, sigue registrando un avance pausado pero constante hacia fuentes renovables.
Con respecto a 2020, los datos de cierre definitivos difundidos por AFM confirmaron lo que el sector adelantó en el mes de febrero con el cierre provisional: las ventas finalmente quedaron un 19,65% por debajo de la cifra correspondiente a 2019.
En términos absolutos, la cifra definitiva de facturación del sector en 2020 ha sido de 1.324,12 millones de euros, frente a los 1.647,86 millones del ejercicio 2019. La bajada de la producción en España se alinea con la caída experimentada por la producción mundial que ha sido de un 19,18%.
El descenso es ligeramente más acusado en el caso del subsector de deformación, que, con 311,07 millones de euros, cae un 21,82%, mientras que las máquinas de arranque con una cifra de 559,42 millones de euros, bajan un 18,68%. Todos los demás subsectores también caen respecto a 2019: componentes y herramientas, un -15%; otras máquinas bajan un 17,72%; los accesorios, un -52,76% y los mecanizados y otros servicios, un -9,31%.
Las exportaciones, condicionadas por las dificultades de movilidad y transporte, caen un 22,25%, quedando en 1.006,01 millones de euros respecto a los 1.293,93 millones de 2019, y suponen casi un 76% de la producción. En este caso, los descensos de arranque y deformación son parejos, con -22,57% en el primero y -22,44%, en el segundo.
Las ventas de los fabricantes nacionales en el mercado interior se reducen un 13,41% en 2020. Por su parte, el consumo aparente (producción+importaciones-exportaciones) de máquinas-herramienta en España ha caído un 31,13%.