El programa ha cualificado a emprendedores con propuestas de servicios o productos innovadores que utilizan tecnologías avanzadas. Los participantes, en sólo cinco meses, han desarrollado su modelo de negocio convirtiéndose en startups susceptibles de crecer y consolidarse. El destino de sus productos o servicios es su implantación en pequeñas y medianas empresas y en empresas tractoras de sectores estratégicos.
Gómez destacó que “cada día comprobamos cómo las startups, mediante su capacidad de escalar soluciones innovadoras, contribuyen a transformar el tejido económico regional”. “Conectan universidades, empresas y administración pública, también generan empleo cualificado que retiene talento en la Región y nos sitúan en el mapa global de la innovación, convirtiéndose en motores de transformación de la economía regional gracias a la innovación, competitividad, sostenibilidad y conocimiento que aportan”, añadió.
En concreto, las empresas emergentes operan en ámbitos relacionados con la biotecnología, salud, agroalimentación, movilidad, energía y transición ecológica, banca y finanzas y telecomunicaciones, entre otros sectores. Estas actividades económicas se contemplan dentro de las áreas de impulso y apoyo al emprendimiento en la Región de Murcia.
Para participar en el programa formativo, que ha ofrecido también aceleración personalizada y conexión con el tejido empresarial, debían ser de nueva creación o tener menos de cinco años de antigüedad o bien siete años si pertenecen a sectores estratégicos como biotecnología, energía o industria. En lo que respecta a la Región de Murcia, se contó con la colaboración del Ceeim como entidad aceleradora.