Estas ayudas, financiadas por el Gobierno de Cantabria, podrán contar con cofinanciación de la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). Serán subvencionables los proyectos de Industria 4.0 o Digitalización Industrial ligados al producto o proceso industrial de la empresa solicitante, siempre que permitan mejoras sustanciales en procesos, productos y modelos de negocio, incorporando tecnologías que combinen soluciones físicas y digitales, comunicaciones, análisis de datos e inteligencia empresarial, tanto a nivel interno como interempresarial.
En particular, se contemplan tecnologías aplicadas a proyectos como:
- Fabricación avanzada con maquinaria o equipos que integren técnicas de Big Data y analítica avanzada.
- Fabricación aditiva, que facilite la producción flexible de piezas personalizadas y geometrías complejas.
- Robótica avanzada y colaborativa, con robots conectados que trabajen en tiempo real junto a operarios.
- IIoT (Internet Industrial de las Cosas), para la sensorización y conectividad de dispositivos y maquinaria industrial.
- Inteligencia Artificial aplicada a la industria, donde los equipos puedan aprender y tomar decisiones de forma autónoma.
- Sistemas ciber-físicos, integrando objetos físicos con capacidades avanzadas de computación y conectividad.
- Realidad virtual, que permita recrear entornos industriales simulados.
- Realidad aumentada y asistencia remota, con información gráfica superpuesta al entorno real.
- Gemelos digitales (Digital Twins), que creen réplicas virtuales de objetos o sistemas reales para su análisis y mejora.
- Tecnologías facilitadoras, como ciberseguridad, gestión de sistemas productivos, logísticos y comerciales, o plataformas colaborativas.
Podrán beneficiarse de estas ayudas las empresas pertenecientes a sectores como alimentación, bebidas, textil, confección, cuero y calzado, madera (excepto muebles), papel, artes gráficas, refino de petróleo, química, farmacéutica, caucho y plásticos, minerales no metálicos, metalurgia, productos metálicos, informática, electrónica, óptica, equipamiento eléctrico, maquinaria, automoción, transporte, muebles, otras industrias manufactureras, así como reparación e instalación de maquinaria y equipo.
Los proyectos subvencionables deberán tener un coste comprendido entre 30.000 y 400.000 euros, y podrán incluir inversiones realizadas entre el 1 de enero de 2025 y la fecha que se establezca como final en la resolución de concesión.
Las empresas deberán desarrollar el proyecto y ejecutar el gasto subvencionado en un centro de trabajo ubicado en Cantabria. Además, estarán obligadas a mantener tanto la actividad como la inversión en la región durante un periodo mínimo de 5 años para grandes empresas y 3 años para pymes, contados desde la concesión de la ayuda.
Los fondos podrán destinarse a inversiones en activos materiales o inmateriales nuevos (hardware y software), necesarios para el funcionamiento de los equipos avanzados, así como a colaboraciones externas para el diagnóstico e implantación del proyecto (hasta un 20 % del gasto total subvencionable), y al informe de auditoría de cuentas.
La intensidad máxima de la subvención será del 75 % del gasto subvencionable, con un tope de 200.000 euros por empresa. Las solicitudes deberán presentarse exclusivamente por medios electrónicos en el plazo de un mes a partir del día siguiente a la publicación del extracto de la convocatoria en el BOC.
Impulso a la innovación industrial
El consejero de Industria, Eduardo Arasti, ha subrayado la importancia de estas ayudas:
«Pretendemos promover la cultura de la innovación en el sector industrial para que las empresas cántabras desarrollen proyectos de implantación de soluciones en el ámbito de la Industria 4.0, mejorando procesos, productos y modelos de negocio y con ello las capacidades de negocio de las empresas».
Estas ayudas buscan fomentar la investigación científica, el desarrollo tecnológico y la innovación aplicadas a los sectores productivos de Cantabria. También apoyan la elaboración de planes regionales de I+D+i, la modernización tecnológica de las pymes, y la introducción efectiva de tecnologías digitales en el entorno industrial.
Asimismo, se pretende impulsar proyectos de investigación industrial y desarrollo experimental orientados a la creación de nuevos productos, procesos y servicios, mejorar la competitividad de autónomos y pymes, y fomentar la divulgación de la I+D+i en la región.