Alberto Gutiérrez, presidente de Airbus España hasta el pasado 1 de octubre y miembro de su comité ejecutivo, subrayó el éxito de la colaboración público-privada que supone este proyecto, que representa un salto cualitativo para Getafe y para Madrid en la atracción de turismo, al unir pasado y futuro en un ecosistema innovador como el aeroespacial. “Es una gran satisfacción -dijo Gutiérrez- poder anunciar este acuerdo tras dos décadas de negociaciones durante las que se han superado numerosas dificultades”.
Bien lo sabe Carlos Valle, quien agradeció los apoyos de Airbus, el consistorio getafense, el gobierno madrileño y el Ejército del Aire y el Espacio, “porque sin la contribución de todos no hubiera sido posible sacar adelante esta idea, fundamental para la conservación de la historia de la aviación que encierra nuestro museo, una de las actividades que ha progresado a mayor velocidad en los últimos cien años”, y que no debe olvidar de donde venimos para seguir avanzando hacia el futuro.
Porque, sin duda, como resaltó la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, durante la rubrica de los distintos protocolos, con este propósito se va a dar una mayor relevancia a la importancia que para esta ciudad madrileña tiene la aeronáutica, cuna de la aviación española. No en vano, Getafe es el tercer mayor complejo aeroespacial de Europa. Y este pacto, además de unir tradición y modernidad, como destacó el Jefe del Estado Mayor del Aire y el Espacio, general Braco Carbó, “contribuye a difundir la cultura de defensa”, algo tan necesario para nuestra industria y para la seguridad y libertad de España.
La materialización de esta alianza estratégica es una apuesta por la Agenda 2030 de la ONU al permitir, como así se define el 17 objetivo de desarrollo sostenible (ODS), movilizar e intercambiar conocimientos, capacidad técnica, tecnología y recursos entre gobiernos (nacional, regional y municipal), sector privado (Airbus) y sociedad civil (Fundación Infante de Orleans, que es una entidad sin ánimo de lucro). Airbus cederá una parcela de 6.000 m2 para levantar el museo con la exposición estática de las aeronaves y un centro para la restauración y mantenimiento de las mismas, así como una construcción que albergará la biblioteca y oficinas. Comunidad de Madrid y Ayuntamiento de Getafe contribuirán a la construcción del museo, y el Ejército del Aire y el Espacio facilitará el acceso de las aeronaves a la pista de despegue y aterrizaje de la base aérea de Getafe para poder realizar las exhibiciones aérea de estos “milagros” que vuelan el primer domingo de cada mes, salvo enero y agosto. Un espectáculo que congrega a una multitud de aficionados y curiosos, en los que aviva la llama del amor por la aviación, y que contará con una amplia extensión para poder disfrutarlo.
El comienzo de las obras del museo, diseñado por el Estudio Lamela, está previsto para el próximo año y en 2026 se contempla que la FIO y todo su equipo de voluntarios entregados a su causa se estrenen ya en Getafe.
Al fin, Carlos Valle, quien confesó a Envera sus desvelos durante la realización del calendario solidario 2024 con el que la ONG nacida de Iberia quiso rendir homenaje a esta importantísima colección, ha logrado el histórico objetivo que se había marcado para dar continuidad a la FIO y a su espléndido tesoro: 48 aeronaves de 32 modelos diferentes, algunas como “la Bücker”, el Súper Saeta o la I-11B fabricadas por construcciones Aeronáuticas S.A. (CASA), Hispano Aviación y Aeronáutica Industrial S.A. (AISA), empresas que marcaron el origen de Airbus en España, compañía tractora del sector y corazón del tejido industrial aeroespacial y de defensa en nuestro país.
Alfonso de Orleans y Borbón, infante de España y pionero de la aviación española que da nombre a la FIO, rompió moldes y trabajó con determinación por conquistar su sueño de ser piloto. Hoy el empeño de otro hombre, Carlos Valle, y su capacidad para movilizar cielo y tierra a lo largo de los años han logrado el anhelo de dar alas a un proyecto que aspira a llegar aún más alto y más lejos.
