¿Cuáles son los pilares de su programa electoral en materia de política industrial?
Partimos de que la industria forma parte de nuestro ADN. Nuestra propuesta garantiza que el modelo industrial de Euskadi, de por sí moderno e innovador, avance en su transformación y siga siendo el motor del estado de nuestro bienestar. Generaremos más y mejores empleos de calidad, en un país en el que la tasa de desempleo ha descendido al 6,3%.
Nuestro modelo de Industria es un referente internacional en el que las instituciones lideramos una política industrial integral y acompañamos a un tejido empresarial competitivo. Donde la colaboración público-privada es una de las fortalezas, Respetando el rol de cada uno.
Planteo medidas para fortalecer la competitividad industrial en en el contexto de las tres grandes transiciones que nos interpelan a nivel global y local: La transición energético-climática, la transición tecnológica y digital, y por supuesto, la transición social, muy ligada al contexto demográfico que vivimos. En torno a las tres se abren oportunidades.
Tres transiciones y dos ejes: Transformar lo existente y generar nueva industria con nuevas empresas y modelos de negocios.
La manufactura y los servicios avanzados conexos a la industria superan el 40% de nuestro PIB.
Planteo un nuevo Plan de Industria 2028 para apoyar la incorporación de la Industria 4.0 y 5.0 con una apuesta contundente por la descarbonización industrial, un incremento interanual mínimo del 6% en I+D+i, una mayor apertura al exterior que sostenga el récord de exportaciones en productos y servicios de alto valor añadido y nuevas herramientas financieras para conseguir un mayor arraigo empresarial. Este plan estará directamente vinculado, entre otros, a la nueva estrategia basque talent, con el objetivo de atraer y fidelizar profesionales locales y extranjeros a nuestro ecosistema empresarial.
¿Qué papel están jugando los fondos europeos Next Generation en las empresas industriales vascas?
Menor del que quisiéramos y muy por debajo del que les correspondería.
En Euskadi contamos con destacados y contrastados proyectos transformadores, pero no han sido suficientemente valorados, ni han sido debidamente financiados. La gestión de los fondos Next Generation no ha respondido a razones de concurrencia o de competitividad, ni ha tenido en cuenta la aplicación de tecnología de desarrollo local para la transformación industrial. Esta manera de actuar ha penalizado a la industria vasca frente a otras opciones y destinos industriales que han favorecido la implantación de empresas extranjeras y la adopción de tecnología procedente de países asiáticos.
Hemos defendido y defenderemos la regionalización de los PERTEs por entender que los recursos llegarían a redundar de manera más eficaz.
En todo caso, la calidad de los proyectos y el buen hacer de nuestro tejido industrial ha permitido obtener recursos europeos como los 160 millones captados para iniciativas vinculadas a la descarbonización en el ámbito de la automoción que coadyuvará a que la industria vasca se posicione en la fabricación de vehículos, furgonetas y autobuses eléctricos con iniciativas lideradas por Mercedes e Irizar, y la implicación de un importante grupo de industria auxiliar, así como el posicionamiento en la fabricación de baterías de litio en estado sólido de la mano de Basquevolt.
¿Qué demandan a la Administración central en el capítulo de la industria?
En primer lugar, respeto al ámbito competencial, teniendo en cuenta que se trata de una competencia exclusiva del Gobierno Vasco. A partir de ahí, echamos en falta un modelo económico en el Estado que teja un ecosistema de forma contundente y comprometida para favorecer el desarrollo tecnológico e industrial de las pequeñas y medianas empresas.
Sería deseable que no volviera a suceder lo que pasa en el Panel Europeo de Indicadores de Innovación Europeo –EIS–, en el que Euskadi, siendo una región de alta innovación, pueda volver a verse penalizada por ubicarse en un Estado con un nivel de innovación media. Para ello, hace falta mayor decisión y convicción por la industria y la innovación. La industria es fuente de empleo de calidad y bienestar para nuestra sociedad.
¿Qué nuevas medidas de financiación contemplan para apoyar a las pymes, verdadero motor del tejido industrial vasco?
El Plan de Ayudas a Pymes, con subvenciones de 600 millones al año, es una medida eficaz que implementaremos. Daremos un nuevo impulso al Fondo público Finkatuz hasta los 1.000 millones de euros para el arraigo empresarial. Ampliaremos la actividad de la Sociedad de Capital Riesgo de Euskadi del grupo SPRI asegurando una dotación mínima anual de 50 millones de euros complementarios a Finkatuz. Y apoyaremos y reforzaremos la actividad del recién constituido Clúster Financiero e Inversor, “BasqueFik”, para desarrollar instrumentos financieros e inversores con visión integral en la empresa.
Alinearemos, en definitiva, las capacidades financieras de Euskadi a través de instrumentos público-privados que conformen un gran fondo vasco para impulsar grandes proyectos económicos transformadores y captar nuevas oportunidades para Euskadi en el mercado global.
Desarrollaremos iniciativas para implicar a las Entidades de Previsión Social Voluntaria, fundaciones bancarias, family office o entidades financieras en la inversión empresarial llegando a invertir 3.000 millones de euros; colaboraremos con las diputaciones forales en la generación de incentivos para atraer empresas y reforzaremos la unidad de “Invest in Euskadi-Basque Country” para atraer inversiones extranjeras en Euskadi.
La atracción del talento es un problema. ¿Qué soluciones proponen en Formación Profesional y en formación en general para captar y retener profesionales industriales?
No concebimos el empleo como un objetivo aislado y por ello, la atracción de talento la abordaremos con un enfoque integral que aborde factores como la educación, la formación laboral, la creación de empleo en sectores estratégicos y la promoción de la innovación.
La nueva estrategia Basque Talent se enmarca en una estrategia que posibilita abordar el reto del talento para su desarrollo, retención y atracción, incluyendo en el mismo a las diferentes dimensiones del talento: científico-investigador, directivo, técnico y emprendedor.
Impulsaremos una Formación Profesional dual, hoy referente a nivel internacional, que responda a los nuevos retos de sectores como la industria, la salud o la agricultura inteligentes, así como otras formaciones en sectores estratégicos y en sectores emergentes, fomentando el talento innovador, reforzando la incorporación de la mujer.
La empresa vasca nos ha trasladado su déficit a la hora de captar nuevos profesionales por lo que apoyaremos a las empresas en sus estrategias para atraer y fidelizar talento global con actuaciones en mercados donde existan perfiles que se puedan adecuar a nuestra demanda. Esto nos exige diseñar un protocolo para la acogida internacional de profesionales y sus familias, y necesitamos agilizar la homologación de los títulos extranjeros.
Será un trabajo integral que requerirá de estrategia, coordinación y recursos gestionados desde la que será el nuevo Basque Talent Center a fin de fortalecer la competitividad territorial para hacer de Euskadi un destino profesional atractivo y amigable.
¿Qué importancia dan a la estrategia digital? ¿En qué se concretan sus planes? ¿En qué otros ejes industriales quieren actuar?
Nuestra estrategia para convertir a Euskadi en un nodo de referencia digital que refuerce la competitividad de la economía frente a los retos que se le presentan en un escenario incierto pasa por ser motor del cambio y la transformación interna, y captar inversión, iniciativas y talento del exterior.
Garantizar la independencia o al menos la autonomía frente a influencias externas, en el ámbito tecnológico y digital
Implementar los programas de apoyo a la inversión, basados en la colaboración público-privada en múltiples frentes como son:
- Las infraestructuras de comunicaciones con el nuevo foco de lograr una amplia cobertura y servicios 5G de uso empresarial.
- Fomentar la economía del dato, para el desarrollo de nuevas empresas y modelos de negocio en torno al mismo.
- Facilitar el desarrollo de soluciones de inteligencia artificial y su uso en las empresas.
- Fortalecer la ciberseguridad de las empresas vascas como un factor clave en el nuevo contexto mundial.
Impulsar el emprendimiento apoyando la creación de startups y empresas innovadoras que desarrollen soluciones digitales y/o tengan nuevos modelos de negocio derivados de la digitalización.
Generar y captar proyectos singulares en ámbitos como la microelectrónica, los datos e imágenes satelitales y la computación cuántica, en coordinación con la ya existente Estrategia BASQUE Q.
En el ámbito de la energía, ¿tienen contemplado inversiones en fuentes renovables?
El Gobierno Vasco a través del Ente Vasco de la Energía (EVE) tiene una larga trayectoria en la promoción de proyectos energéticos ligados a la eficiencia, la garantía de suministro energético y a la transformación del mix energético de generación y de consumo.
El compromiso de Euskadi con la descarbonización y el objetivo de neutralidad climática con anterioridad al 2050 es total. Y el EVE está impulsando y promoverá con intensidad nuevos proyectos de tecnologías limpias que nos permitan avanzar en la descarbonización de nuestra sociedad. La energía eólica, la fotovoltaica, el hidrogeno verde o las energías oceánicas son algunos de los ámbitos de trabajo y refuerzo en los próximos años, en los que también tendrán cabida nuestra ciudadanía y empresas.
A su vez, a través de subvenciones, se están impulsando muchos proyectos de autoconsumo, de eficiencia energética, sustitución de vehículos por tecnologías alternativas, puntos de recarga eléctrica o comunidades energéticas.
Vamos a concentrar este esfuerzo para que cada vez nuestro mix energético sea más renovable y descarbonizado.
Intensificaremos, asimismo, la promoción de proyectos de generación renovable km0 en ámbitos locales que permitan acceder a la ciudadanía, comercio y pequeña empresa a energía cercana verde y competitiva.
Prevemos, en definitiva, el impulso a la instalación de 900 MW de generación renovable maximizando la generación de proximidad (autoconsumo, comunidades energéticas…), combinada con instalaciones de mayor tamaño.
¿Qué importancia tiene el fomento de la sostenibilidad en el futuro de la industria vasca?
Es absolutamente imprescindible avanzar en el desarrollo sostenible y en procesos de producción y productos-servicios menos contaminantes. Cuidar la eficiencia energética, uso de energías verdes teniendo como referencia la neutralidad tecnológica y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
El objetivo es avanzar en la necesaria descarbonización que permita a Euskadi alcanzar la neutralidad antes de 2050 a la vez que se ajustan los costes energéticos, consiguiendo empresas más sostenibles y competitivas a nivel internacional. Tenemos que transformar nuestro tejido industria ahondando en la descarbonización.
La economía circular es uno de los elementos que se nos presenta tanto como mitigador de riesgos como generador de oportunidades alternativas para fortalecer nuestro tejido económico. Por lo tanto, aplicar herramientas de circularidad en las empresas es clave para mejorar su competitividad, para reducir las emisiones de CO2 vinculadas al cambio climático y para reducir los residuos que acaban en vertedero.
Impulsaremos la puesta en marcha de proyectos de gestión de residuos para la valorización de un millón de toneladas que anualmente se llevan a vertederos, lo que nos requerirá formar nuevos perfiles profesionales por lo que pondremos en marcha el programa “Basque green talent” (empleo verde), para formar a personas jóvenes en las oportunidades de la economía circular.
¿Tienen algún plan de mejora de los polígonos industriales?
El desarrollo, crecimiento y la captación de nuevos proyectos industriales que generen empleo de calidad y riqueza para el conjunto de la sociedad, es imprescindible para el mantenimiento y avance del estado del bienestar en Euskadi.
Resulta, por ello, esencial reforzar y ampliar la red de infraestructuras que puedan atraer y facilitar la implantación y crecimiento de proyectos industriales y científico-tecnológicos en Euskadi.. Así, entre otros,
- Crearemos un Fondo de Inversión para el Desarrollo de Infraestructuras Industriales adscrito a la SPRI que, partiendo de la participación pública, atraiga capital privado para el desarrollo de nuevas infraestructuras industriales.
- Ahondaremos en la estrategia de recuperación y puesta en valor de activos (suelo e infraestructura industrial) que, teniendo un interés industrial y económico, pudieran estar en desuso, minimizando la artificialización de suelo para los nuevos emplazamientos.
- Pondremos a disposición de esta nueva industria 1.250.000 m2 de parcelas industriales y edificaciones provenientes de actuaciones de regeneración y recuperación de activos en desuso.
- Habilitaremos y pondremos a disposición del mercado 1.600.000 m2 de parcelas industriales y edificaciones procedentes de nuevos desarrollos urbanísticos.
- Apoyaremos proyectos de comunidades energéticas o autoconsumo en polígonos industriales, simplificando los trámites asociados a estos proyectos, poniendo también a su disposición líneas de financiación.
Asimismo, la estrategia de desarrollo y mejora de las infraestructuras industriales será complementada con el refuerzo de la Red de Parques tecnológicos que serán ampliados en los tres territorios para la atracción e implantación de proyectos empresariales de alto valor añadido.
