¿Cómo ha evolucionado la industria ferroviaria desde que se creó la primera línea ferroviaria en España hace 175 años?
Hace 175 años, con la inauguración el 28 de octubre del 1848 de la primera línea ferroviaria de la Península Ibérica (Barcelona-Mataró) se marcó el inicio de una revolución en el transporte. Durante todo este tiempo, el ferrocarril se ha convertido en un pilar de nuestra movilidad, economía y sociedad. Conecta ciudades y regiones de una forma más sostenible, eficiente y respetuosa con el medioambiente, favoreciendo, además, la cohesión territorial, generando oportunidades y fomentando la industrialización. La industria ferroviaria, como una de los protagonistas clave en esta transformación, también ha experimentado cambios. Se ha modernizado, se han introducido tecnologías avanzadas y se ha fomentado la sostenibilidad, lo que la ha convertido en un componente crucial para lo movilidad sostenible española, dado que ha permitido generar nuevas capacidades para garantizar la eficiencia, seguridad y experiencia del usuario. Y no sólo eso, sino que, además se ha convertido en un referente mundial y uno de los pilares de nuestra marca país.
¿Qué importancia tiene la industria ferroviaria en España o qué supone para el país dicha industria?
La industria ferroviaria representa una parte esencial del transporte español. Es importante destacar que nuestra industria, además, tiene un peso muy relevante en la economía del país, alcanzando el 8% del PIB industrial. Muestra de ello son las cifras de los 118 socios de Mafex que, en la actualidad, representan de forma agregada y en años recientes, el 83% de la exportación ferroviaria española. Cuentan con una facturación ferroviaria superior a 4.500 millones de euros y generan 30.000 empleos. Desempeña, por tanto, un papel esencial en el fomento de empleo de calidad e impulso del crecimiento económico a través de la inversión y la innovación (4% de inversión de la facturación en I+D). Cabe destacar también la posición de liderazgo mundial de nuestro país, que está a la cabeza en soluciones tecnológicas y servicios altamente especializados para el transporte ferroviario. Las empresas españolas, representan una completa cadena de valor y están presentes en los principales proyectos, tanto de alta velocidad, como de movilidad urbana o mercancías en más de 95 países de los cinco continentes. Y son, además, clave en programas pioneros de I+D+i europeos como es Europe´s Rail JU, donde tienen una amplia representación. Sin lugar a dudas, su contribución al desarrollo y la eficiencia en la movilidad sostenible la convierte en un componente estratégico para el presente y futuro de España.
¿De qué manera considera que se puede mostrar el gran potencial de la industria ferroviaria en España?
Existen múltiples formas. Debemos dar visibilidad a todos aquellos proyectos en los que nuestra industria está y ha estado involucrada a nivel nacional e internacional. Pero si algo destaca y aporta confianza los posibles receptores de nuestros productos y servicios ferroviarios es, el ofrecerles la posibilidad de visitar nuestro país y observar las infraestructuras ferroviarias de que disponemos, mostrándoles el impacto que tienen nuestra calidad de vida y desarrollo de nuestras ciudades y regiones. Nuestro país es el mejor escaparate para nuestra industria. Y nuestras infraestructuras nuestra mejor tarjeta de presentación.
Por supuesto están también las fórmulas tradicionales de promoción como en cualquier otro sector, como son las ferias y congresos, destacando en nuestro caso Rail Live! El evento de referencia en España del sector ferroviario que cuenta con un marcado carácter internacional y que este año por ejemplo reunirá a más de 7.000 participantes de más de 40 países, en Madrid (IFEMA) entre el 29 de noviembre y el 1 de diciembre.
¿Cómo cambió la industria ferroviaria con la llegada de la alta velocidad a nuestro país hace 31 años?
Nuestra red de alta velocidad supuso un revulsivo en el proceso de modernización de España ya que vino a cambiar su imagen anticuada.
Supuso, además, un impulso a la cohesión territorial y social de nuestras regiones. Pero además de revolucionar el mercado del transporte, su implementación aceleró y consolidó el desarrollo de un potente tejido industrial ferroviario que hoy en día se asienta de manera sólida en tres grandes ejes: la innovación, la internacionalización y el conocimiento y capacidades adquiridos. Este conocimiento específico resultó inicialmente de la integración de diferentes tecnologías, algunas de ellas de otros países europeos, pero integradas gracias a las ingenierías y constructoras españolas. Poco a poco fuimos consolidando la industria existente y desarrollando cada vez más tejido empresarial propio nacional, hasta situarnos en el presente, donde podemos presumir de ser uno de los pocos países en el mundo con una industria líder en el diseño, fabricación de material rodante, señalización, construcción, operación y mantenimiento ferroviarios.
¿Cómo afrontan la innovación y la transformación digital desde el sector ferroviario? ¿Qué medidas se están adoptando?
Las nuevas tecnologías digitales van a transformar la forma en la que nos planteamos la movilidad. Esto deberá llevarse a cabo bajo una perspectiva que ponga a los usuarios en el centro de los procesos ofreciendo las mejores experiencias de movilidad. Brindar la solución más eficiente en cada momento integrando datos procedentes de varias fuentes de la infraestructura y la ciudad para una intermodalidad fácil y sencilla, que permita avanzar hacia nuevos paradigmas de movilidad hasta llegar al Mobility as a Service y donde el ferrocarril sea el eje vertebrador e ha producido una inversión importante en tecnologías avanzadas y digitalización en la gestión y operación de la red ferroviaria.
Y en esta transformación digital, las soluciones de la industria ferroviaria española tienen un papel relevante. Su apuesta por la I+D ha supuesto que se impulse la introducción en el mercado de los más innovadores desarrollos tecnológicos. El ferrocarril también está embarcado en un momento de transformación imparable.
¿Cómo se está adaptando la industria ferroviaria a la transición energética y la sostenibilidad?
El ferrocarril es sinónimo de sostenibilidad. La industria está preparada y ofrece soluciones innovadoras e inteligentes adaptadas a las nuevas necesidades de los operadores y de los usuarios reforzando el compromiso del sector con el medio ambiente. Ejemplo de ello son los desarrollos tecnológicos que permiten la reducción de emisiones y una mayor, aún si cabe, eficiencia en el gasto energético en todo el proceso, desde el diseño e ingeniería de la infraestructura hasta la fabricación, operación y mantenimiento; apostando por las smart grids, por el uso de simuladores que faciliten una conducción eficiente y mejorando también la sostenibilidad de estaciones e intercambiadores. Sin embargo, los desafíos futuros son importantes. Debemos mantener el esfuerzo y estar enfocados, con la capacidad de innovación que nos caracteriza y trabajando de manera conjunta.